Funcionarios del más alto nivel hablan de la supuesta austeridad del Estado en los gastos. Los hechos arrojan todo lo contrario. En un período tan difícil, en el que millones de colombianos se ven en enormes dificultades para sobrevivir, se revela que este mes y el anterior se aprobaron compras de camionetas blindadas por valor superior a los 24 mil millones de pesos. Van para la Presidencia de la República, magistrados de la Corte Suprema de Justicia, el Comando General de las Fuerzas Armadas y otros funcionarios. Aparte de tener vehículos de representación, muchos exigen que sean camionetas de alta gama y blindadas. Al fin y al cabo, ahí está el ciudadano que las paga.
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