La OCDE es un club exótico para Colombia. Es un club de ricos. Cuando usted ingresa a un club de ricos y usted es un pobre le exigen una serie de requisitos que muy difícilmente usted puede cumplir y que al intentar cumplirlos, termina es sometiéndose a todos los requerimientos y las formas como ellos hacen sus negocios. Termina es en las órbitas y en los intereses de ellos y no en los nuestros.
Todo ese club de ricos lo que hace es imponer las fórmulas típicas del libre comercio, formas neoliberales que nosotros tantas veces hemos criticado: mayor liberalización del sistema financiero, de las importaciones, de la inversión; privatizaciones a diestra y siniestra.
Y en el campo laboral reducen el valor de la mano de obra, ya hablan de reforma pensional, están promoviendo una nueva reforma tributaria en la que se grabarán más los impuestos a las rentas de trabajo y quieren grabar las pensiones y subir más el IVA.
Son todas normas absolutamente regresivas. Ingresar a la OCDE es entrar al club donde le van a imponer todas esas medidas para satisfacer los intereses de los países ricos y de sus inversionistas. Quedamos en una situación muy precaria. Aquí va a aumentar es la pobreza, la desigualdad y la precariedad laboral.
