Síguenos en:
x
Columnistas | PUBLICADO EL 31 julio 2020

Proyecciones sombrías

Por Ramiro Velásquez Gómezramirovego@gmail.com

Este año es duro, no solo por la covid-19 sino por asuntos climáticos. Las proyecciones de la Organización Meteorológica Mundial indican que en los próximos cinco años (2020-2024) hay una posibilidad del 20 % de que algún año la temperatura del planeta sea de al menos 1,5 ° Celsius sobre la era preindustrial.

Ese es el límite mínimo que persigue el Acuerdo de París sobre el cambio climático. Hay un 70 % de posibilidades de que al menos un mes de cada uno de esos años alcance esa temperatura.

Para muchos son datos que no dicen nada, pero esa temperatura es la que está trastocando el clima terrestre. Este año, por ejemplo, dice el informe, muchas partes de Sudamérica estarán más secas de lo normal. Lo estamos viendo.

En ese quinquenio todas las regiones del planeta estarán más calientes que en el pasado, salvo en los océanos del sur.

No se entiende el afán de seguir en esta loca y ascendente carrera hacia una catástrofe ambiental. Un artículo la semana pasada en el journal Reviews of Geophysics evaluó las posibles temperaturas si se duplican las emisiones de carbono (hacia donde vamos) y situó el rango probable entre 2,6° y 4,1° Celsius. Los dos son malas noticias, peor la última.

Recordemos que el Panel Intergubernamental de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático advirtió hace dos años que el calentamiento, tal como va, con los 1,5° que estamos alcanzando ya, significará que en 20 años más viviremos una cascada de efectos, desde la escasez de comida a inundaciones severas y sequías. Y más pobreza con lo que implica.

Se debe a la indudable hipocresía de los gobiernos, incluido el nuestro, de prometer y no cumplir, de decir una cosa en escenarios internacionales y hacer otra fronteras adentro.

Hay esfuerzos de ciudades y algunos países para ser carbono neutros hacia 2050, algunos un poco antes, pero será tarde e insuficiente.

No se transforma con celeridad la matriz energética y se depende demasiado de combustibles fósiles en todo el mundo, dependencia que inexplicablemente muchos piden mantener en aras de un discutible progreso.

2040 o 2050 están cerca, mas desde esta década comenzaremos a sufrir climas nunca vividos por la humanidad, se deduce del informe de la OMM.

La crisis de la covid-19 ha tapado la climática y ha hecho creer que al usarse menos energía fósil estos meses (aunque hay repunte) la situación mejorará. No es verdad.

Maullido: con brotes y rebrotes la pandemia se extenderá a 2021. El pico está lejos .

Ramiro Velásquez Gómez

Si quiere más información:

.