La cifra fue menor al promedio nacional que se ubicó en 1,14%, y estuvo presionada por los costos de la educación y el transporte.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) observó en febrero una variación de 1,14%, según reveló el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
No obstante, ese indicador para Medellín fue inferior, 0,62%, siendo el más bajo entre las diferentes capitales colombianas, de acuerdo a la presentación hecha por la directora encargada del Dane, Andrea Ramírez.
Según la funcionaria, la dinámica de precios negativa que observaron productos como los plátanos, las papas, las cebollas y los alimentos para animales, así como el servicio de electricidad, provocaron que la inflación estuviera en el rango inferior de la medición nacional.
En contraste, se apreciaron variaciones positivas en los valores de los grupos de gasto de la canasta familiar asociados a arrendamientos y a la educación en la capital paisa, durante el segundo mes de este año.
Ciudades como Santa Marta (0,64%), Pasto (0,68%) y Cúcuta (0,68%) también evidenciaron un IPC menor al promedio nacional, mientras que Bogotá (1,53%) y Popayán (1,45%) tuvieron el índice más alto.
El reporte del Dane precisó que el IPC del país, de 1,14%, estuvo jalonado en febrero por la educación (5,57%), transporte (1,57%) y por último, alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles (1,16%).
“Febrero es un mes clave para la educación en el país. Es cuando empieza la operación de los colegios y los niños, adolescentes y adultos empiezan a estudiar y eso explica el gran cambio”, explicó Ramírez, quien destacó que durante enero el IPC de la educación fue 0%.
Sobre el transporte dijo que 16 de las 23 ciudades tuvieron aumento en este servicio durante febrero, ajuste que no habían hecho en el mes de enero y por eso se vio reflejado en el segundo mes del año.
De las cuentas del Dane llaman la atención los comportamientos alcistas de productos como las frutas frescas y la carne de res, a la vez que se nota una dinámica a la baja de las variaciones en los valores de la electricidad, tendencia que se ha visto desde mediados de 2024.
Otro fenómeno detectado por el Dane es la variación incremental del gas, que tuvo un cambio drástico en febrero, pues la variación en ese mes fue de 14,42%, aunque con porcentajes mayores en ciudades como Ibagué (35,15%) y Neiva (34,90%).
Por debajo del 1,14% se ubicaron las bebidas alcohólicas y tabaco (0,97%), recreación y cultura (0,93%), restaurantes y hoteles (0,82%), bienes y servicios diversos (0,81%), muebles, artículos para el hogar (0,65%), alimentos y bebidas no alcohólicas (0,60%), salud (0,54%), prendas de vestir y calzado (0,54%) y por último, información y comunicación (-0,02%).
En febrero de 2025, el IPC para los últimos doce meses observó una variación de 5,28%, nivel que se mantiene desde finales del año pasado, pues en enero fue 5,22% y en diciembre y noviembre de 2024 estuvo en 5,20%, arriba de la meta del Banco de la República que es de 3%, y lo que sería evidencia de un estancamiento en el proceso desinflacionario.
En este caso la divisiones que mostraron comportamientos altos fueron restaurantes y hoteles (7,73%), educación (7,38%), alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles (6,58%), transporte (5,64%) y por último, salud (5,42%).
A su turno, bebidas alcohólicas y tabaco (4,92%), alimentos y bebidas no alcohólicas (4,56%) mostraron comportamientos inferiores al promedio anual de 5,28%.
