La EPS Sura radicó en la mañana de este martes, ante la Superintendencia Nacional de Salud, la solicitud para el desmonte progresivo de la EPS, que cuenta hoy con 5,42 millones de afiliados, la mayoría de ellos antioqueños.
La noticia se da luego de los malos resultados financieros que se han ido acumulando y que ahora tienen a la EPS al límite, si sigue funcionando se consumirá las reservas técnicas que es la plata con la que puede garantizar el pago de sus deudas, es lo único que le queda. Al menos así lo explicó Juana Francisca Llano Cadavid, presidenta de Suramericana, en diálogo con El Colombiano.
¿Por qué se llega al punto de que la EPS Sura salga a pedirle al Gobierno que la ayude a desmontar todo lo que lleva 34 años construyendo?
“Es la suma de muchas circunstancias” que nos superan como compañía. Hoy tenemos un sistema de salud con un gran logro social, por supuesto, y es un derecho fundamental a la salud que otorga coberturas ilimitadas pero con recursos limitados. Hoy estamos viviendo más, es decir, nos estamos envejeciendo más. Hoy tenemos un perfil epidemiológico distinto, con nuevas enfermedades, y también más tecnologías en salud, evidentemente hay mayor consumo de salud, incluso por sanos. Esto no solo pasa en Colombia, esto es un tema a nivel global y nuestro sistema de salud hoy no reconoce esto y no está suficientemente bien financiado.
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En Sura hicimos todo lo que está a nuestro alcance. Hemos modificado nuestros modelos operativos tratando de ser más eficientes. Hemos buscado y diseñado modelos de atención en salud para prevenir desenlaces en enfermedades que sean peores para los usuarios. Hemos conversado con el Gobierno, hemos conversado con el Congreso, hemos conversado con muchas, muchas, muchas instancias, personas e instituciones para evitar llegar a este punto.
Lo cierto es que en este punto “EPS Sura ya no tiene patrimonio, cuenta con reservas técnicas para responder a sus obligaciones y eso es lo que nos hace tomar la decisión. Es decir, hoy podemos mirar a nuestros afiliados y podemos mirar a las clínicas y hospitales y a los aliados y decirles que hoy tenemos con qué cumplir nuestras obligaciones y queremos tomar una decisión responsable con ustedes como afiliados y con las clínicas de hospitales, a través de este programa de desmonte progresivo, para no repetir historias que hemos conocido en el país de otras EPS que dejan deudas en el sistema”.
¿Usted decía que ha hablado con el Gobierno, con congresistas, con tomadores de decisión y qué es lo que ha encontrado como respuesta?
“En general, creo que todos entendemos que el sistema de salud tiene desafíos y retos, pero las reformas que hasta ahora se han presentado no resuelven estructuralmente esos desafíos y retos. Y eso se convierte tal vez en uno de los principales retos como país: que lleguemos a encontrar ese mejor camino. Ahora, EPS Sura hoy no está hablando de reforma, EPS Sura hoy está hablando de un programa de desmonte progresivo para el retiro voluntario, que es el que consideramos el mejor mecanismo en el mejor interés de los afiliados, de los prestadores y de nuestro talento”.
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Todas esas cosas que usted mencionaba que van llevando a la crisis, se entienden como hechos paulatinos, que vienen ocurriendo de forma estructural durante mucho tiempo. ¿Cómo se explica que las pérdidas de EPS Sura empiecen solo en 2022 y se hayan consolidado en 2023?
“La insuficiencia de la UPC en esos 2 años ha sido importante para la compañía, porque, además, lo que sí podemos ver es que hubo a partir del 2020 a nivel global e inclusive en Colombia un mayor consumo de salud, que se suma a la insuficiencia de UPC. Hoy en día hay muchas más coberturas en el plan básico de salud de las que se tenían anteriormente. Todo eso lleva a los resultados que ya manifesté”.
¿Entonces, el Presidente tiene razón cuando dice que este es el resultado de problemas estructurales y sistémicos que se han acumulado a lo largo de los años y no a situaciones coyunturales recientes?
“El sistema de salud sí tiene retos estructurales. Claro que los tiene, pero también ha existido una coyuntura que tenemos que reconocer que tiene que ver también con traslados masivos, que tiene que ver con el aumento en el incremento de las coberturas en el Plan Básico de Salud, y por eso es que EPS Sura responsablemente toma esta decisión”.
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La Presidencia de la República dice en el comunicado que en los primeros cuatro meses del año le entregó a EPS Sura $3,5 billones, ¿ese dinero no era suficiente para atender a los pacientes que hoy tiene?
“Exactamente. Claro que el Gobierno nos entrega una UPC (Unidad de Pago por Capitación). Claro que el Gobierno nos entrega unos presupuestos máximos y nunca hemos dicho que no. El asunto es que no son suficientes”.
¿En qué consiste el plan de desmonte? ¿Qué es lo que vamos a ver de aquí en adelante?
“Un plan de desmonte progresivo es un retiro voluntario del sistema, que nos permite a nosotros proponerle al Gobierno cómo desarrollar en el mejor interés de los afiliados y de los prestadores ese programa. Entonces, lo que sigue es, primero, esperar la aprobación del plan por parte de la Superintendencia Nacional de Salud. Hoy es el Gobierno, a través de la Supersalud, el que tiene que definir si aprueba o no el plan de desmonte progresivo que EPS Sura le entregó. Para eso hay unos términos legales establecidos que son de aproximadamente 65 días, que pueden tener extensiones en función de las conversaciones que se tengan con la Superintendencia y con el Gobierno en general. Cuando eso se apruebe empezaría el plan de desmonte”.
¿Cuál es la diferencia entre un desmonte progresivo y un retiro voluntario?
“La diferencia aquí es que la EPS Sura le propone al Gobierno esa forma de hacerlo el desmonte y le pone a su disposición unos servicios temporales, para hacerlo de la mejor manera posible. Por ejemplo, ponemos a disposición del Gobierno, durante este camino, tecnologías que haya diseñado EPS Sura; equipos expertos en la gestión de riesgo en salud de las poblaciones que vamos a entregar; líneas de atención para los afiliados y para la EPS receptora para poder ubicar adecuadamente a ese afiliado; en los trámites que va a tener; en la entrega de las historias clínicas. También ponemos a disposición modelos de atención en salud pública, entre otra serie de servicios que nosotros le proponemos al Gobierno, que esta compañía lo puede acompañar en el tránsito de un plan de desmonte progresivo. Entonces es un proceso más ordenado, diligente, poniendo a disposición todas nuestras capacidades para hacerlo de la mejor manera posible para los afiliados, para la red de prestadoras y para el Gobierno”.
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Teniendo claridad de la fragilidad del sistema de salud, ya que tenemos tantas EPS intervenida y entendiendo que esta decisión no va a ser de ustedes. ¿En manos de quién podrían terminar los usuarios de EPS Sura?
“Lo dijiste muy bien, esa es una decisión del Gobierno Nacional, a quien le corresponde, y lo debe hacer analizando el perfil epidemiológico, las capacidades territoriales, etcétera”.
Si la Superintendencia les responde que no acepta ese desmonte progresivo, ¿Qué opciones le quedan a EPS Sura?
“Primero le haríamos un llamado a la Superintendencia en el sentido de que este es un camino responsable que se anticipa a la situación, para que EPS Sura pueda cumplir y gestionar todas sus obligaciones, y en caso de que la Superintendencia decida no aceptarlo, la ley dispone que el camino sería el de una intervención por parte de la Supersalud”.
O sea que solamente hay dos caminos o la Superintendencia acepta este desmonte progresivo o la interviene, dado que, como usted lo dijo en la rueda de prensa, no se están cumpliendo con los requisitos financieros de habilitación...
“Es así como está planteado en el marco jurídico. El marco jurídico colombiano te permite como 3 caminos: la solicitud de una intervención forzosa para liquidación, el retiro voluntario y el plan de desmonte progresivo, que es por el que EPS Sura optó con el objetivo de poder proponerle al Gobierno cómo hacerlo y adicionalmente, cómo nosotros ponemos a disposición todas las capacidades técnicas y operativas y de talento humano que tiene la compañía para hacer ese proceso de la mejor forma posible. Lo que no hubiéramos podido hacer con los otros dos mecanismos”.
¿Cuáles son las consecuencias de una intervención si la superintendencia optara por esa alternativa?
“La consecuencia de una intervención es que ya la gestión de la compañía queda en manos del interventor”.
EPS Sura ha sido de alguna manera benevolente con el Gobierno y a lo largo de todo este tiempo que ha planteado reformas a la salud. ¿Por qué no insistir por esa vía?
“Mira, hoy EPS Sura no está hablando de reforma, hoy estamos hablando de un plan de desmonte progresivo, porque hoy no hay una reforma, ninguna de las que se han puesto sobre la mesa resuelve estructuralmente los problemas que tenemos en el sistema de salud, y estando el sistema de salud en esas circunstancias, nosotros no podemos desempeñar el rol adecuadamente como aseguradoras dentro del sistema. La posición hoy de EPS Sura es la más responsable, dado que hoy no tenemos ninguna reforma que realmente se encargue de resolver lo que estructuralmente necesitamos resolver”.
Supongamos que el Presidente o el ministro o alguien en el Gobierno los llama con la intención de salvar a EPS sura, porque ellos bien han dicho muchas veces que es la mejor EPS del país. ¿Tendría que hacer el Gobierno para lograr salvarla?
“Hoy estamos en la posición de la presentación de un plan de desmonte progresivo. También, como lo dijimos en la rueda de prensa, claro que estamos dispuestos a conversar con todos los actores, y eso incluye el Gobierno nacional. Pero es que esto supera el gobierno nacional, lo que necesitamos es un consenso nacional de muchos actores alrededor de la reforma que se necesita, que esperamos que EPS Sura pueda jugar un rol desde su conocimiento en salud para aportar a esa reforma que se necesite”.
¿Qué va a pasar con los afiliados de EPS Sura?
“Seguimos siendo la EPS de esos afiliados. Hablémoslo muy pragmático, hoy no ha pasado nada con los afiliados y mañana tampoco, y va a haber un tiempo en el que esta compañía, hasta que el gobierno nacional lo defina, que nosotros seguiremos siendo su EPS, seguiremos prestando servicios, seguiremos atendiendo sus llamadas, seguiremos acompañando a los enfermos crónicos en todo lo que necesitan. Seguiremos acompañando a todos los afiliados y el cuidado de la vida sigue siendo nuestra determinación. En el momento en que a nosotros nos acepten el plan de desmonte progresivo, seguiremos cuidando a los afiliados para entregarlos de la mejor manera posible a las EPS receptoras, inclusive poniendo a disposición de esas EPS receptoras nuestros modelos operativos, nuestro talento humano, nuestras tecnologías”.
¿Y qué pasará con los empleados de EPS Sura?
“Esta compañía es lo que es por los empleados y a ellos nos debemos y el cuidado de la empleabilidad es nuestro norte y lo vamos a hacer y buscaremos todos los mecanismos para eso”.
¿Y qué le dice a los prestadores y proveedores, que muchos dependen completamente de EPS Sura?
“Quiero darles la tranquilidad de que esta compañía cuenta con las reservas técnicas para hacerle frente a las obligaciones que tiene con ellos”.
¿De cuánto es esa reserva técnica?
“Son aproximadamente dos billones de pesos”.
Cuando se acabe EPS Sura, ¿con cuáles servicios en salud va a permanecer Suramericana?
“Esta es una compañía que es experta en salud, hoy tenemos pólizas de salud voluntarias que no tienen ninguna afectación, que siguen normalmente en el mercado con compañías sostenibles, bien reservadas, con modelos internos de solvencia adecuados. Sé que eso es un lenguaje técnico, pero espero que le dé tranquilidad a todo el mundo, porque son compañías muy potentes y, claro que sí, estamos viendo cómo seguir desarrollando modelos de salud en los que podamos acompañar a miles de colombianos, como siempre lo hemos hecho durante estos últimos 80 años”.
Es decir, podrían seguir ustedes en el negocio de la prestación como ayudas diagnósticas y demás que también vienen haciendo en su integración vertical...
“Sí, podríamos”.
¿Algún mensaje que usted crea que es importante dejar en esta entrevista?
“Yo solo quisiera reiterar, no es una decisión fácil, es una decisión dolorosa, pero es una decisión responsable. Somos responsables cuando miramos al país y le decimos que EPS Sura tiene estas condiciones: ya agotó su patrimonio, aún conserva reservas técnicas y queremos buscar cumplirlas las expectativas a nuestros afiliados y a nuestra red de prestaciones hasta el último minuto”.
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