Si bien la capital antioqueña fue la quinta ciudad del país con mayor aumento total de precios en 2017, al registrar una variación del 4,16 %, hubo un hecho particular y es que el combustible subió más del doble que la inflación.
Esto de manera comparativa, pero hay que aclarar que no existe correlación entre ambos indicadores porque el aumento del combustible está atado al precio internacional del petróleo.
De acuerdo con los datos del Ministerio de Minas y Energía y su tabla de precios sugerida, hace un año el precio de galón de corriente para Medellín fue de 7.999 pesos y terminó diciembre en 8.841 pesos. Es decir, un aumento de 842 pesos a lo largo del año, lo que significó un alza de 10,53 % en cada galón.
Para el caso del Acpm se comenzó 2017 con un precio de 7.615 pesos y se terminó en 8.252 el galón. Esto significa un incremento de 637 pesos y una variación de 8,37 %.
Si ambos datos se analizan con la inflación total observada para Medellín en el mismo año, de 4,16 %, significa que el precio de la gasolina sobrepasó 6,37 % el dato de inflación total, mientras que el del Acpm lo hizo en 4,21 %.
Para tratar de entender este fenómeno, Juan Fernando Prieto, presidente de AES Colombia (Asociación de Distribuidores Minoristas de Combustible), capítulo Antioquia, indicó que “el incremento en el precio de los combustibles del año pasado no se justificó con los bajos precios del petróleo y debió verse reflejado en un menor precio que favoreciera el bolsillo de los consumidores”, comentó.
Es de recordar que los precios del Gobierno son de referencia y de libertad vigilados. Operan sobre una base de costos e ingresos para el distribuidor minorista. Pero cada estación, de acuerdo con los servicios que ofrece (número de empleados y complementos), maneja sus precios para que su negocio sea rentable. “Se habla de un régimen de libertad vigilada y por eso cada empresario fija sus precios para ser viable en el mercado”, agregó Prieto.
Asimismo, recordó el dirigente que el margen de distribuidor minorista y mayorista se incrementa anualmente. Se espera que en febrero próximo varíe este margen de ganancia, que para el distribuidor minorista está en 706,37 pesos, mientras que el mayorista es de 358,63 pesos por galón, este último que se deberá reajustar en junio próximo.
También hay que sumar otras variables como los impuestos y el transporte del combustible, que contribuyen a encarecen el valor de la gasolina para Medellín.