Una de las apuestas de aquí a 2022 es que las transacciones de comercio electrónico en el país lleguen a los 290 millones.
Parte del reto de conseguir ese objetivo está en qué tanto acceso a tecnología tienen las zonas más alejadas del país, de ahí que el Consejo Nacional de Política Económica (Conpes) ya tenga un borrador de propuesta para ese pendiente.
El documento contempla 11 líneas de acción que van desde iniciativas de educación, pasando por mayor control y transparencia, hasta mejoras en operaciones digitales para hacer más incluyentes a las Fintech.
El avance digital será muy importante: datos de la Banca de Oportunidades dan cuenta de que las sociedades especializadas en depósitos electrónicos están concentradas en ciudades grandes.
De acuerdo con esa institución el 95 % de estas se encuentran en las capitales del país, mientras que apenas un 5 % están en los municipios intermedios.
Por eso uno de sus propósitos tiene como eje la implementación “de una estrategia para reducir los costos de los certificados de firma digital de manera que más empresas, especialmente microempresas, puedan utilizarlos para realizar transacciones electrónicas”.
Freddy Castro, director de Banca de Oportunidades, aseguró que el plan es importante porque implica que el sistema financiero se actualice por los cambios digitales.
“Está demostrado que cuando las personas acceden al sistema financiero alcanzan más niveles de bienestar. La inclusión sirve para que las personas ahorren en el corto, mediano y largo plazo. La política de inclusión financiera es un medio para alcanzar equidad”, puntualizó Castro sobre este tema.
Tesis en la que concuerda Edwin Zácipa, cofundador de Colombia Fintech. Para el experto, el Conpes ayudará mejorar en inclusión: “entre más operadores de certificación digital tengamos, más empresas podrán formalizarse ingresando al sistema financiero”; aunque no planrea canales digitales para seguros.
Y más allá del reto digital el acceso al sistema general condiciona otra serie de cambios. Según la Banca de Oportunidades, en las ciudades principales el número de adultos con productos financieros es del 88,7 %, mientras que en las zonas rurales el dato es del 66 %, este último resultado, se lee en el Conpes, tiene su explicación en el buen comportamiento del crédito agropecuario y rural de fomento.
“Las estadísticas de Finagro muestran que el saldo de la cartera ha venido crecido significativamente, al pasar de 11,1 billones de pesos en 2010 a 26,9 billones en 2019”, se lee en el Conpes (ver Informe).