No ha pasado ni una semana desde que las autoridades colombianas inadmitieron a un extranjero que buscaba entrar a Medellín porque en su contra pesaba una alerta internacional por presuntas violencias sexuales contra menores de edad y este martes 11 de febrero se dio a conocer otro caso.
Esta vez, Migración Colombia impidió el ingreso de un hombre proveniente de Washington, Estados Unidos, quien pretendía entrar por el aeropuerto José María Córdova, de Rionegro. Según la entidad, el extranjero presenta una alerta Angel Watch como posible agresor sexual de menores de edad. Esta es una iniciativa internacional que tiene como fin prevenir a las autoridades de todos controles migratorios sobre potenciales riesgos para niños, niñas y adolescentes de parte de adultos relacionados con delitos sexuales contra esta población, ya sea por antecedentes o por sospecha.
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Tras conocerse la nueva inadmisión del extranjero, el alcalde de Medellín Federico Gutiérrez se pronunció a través de las redes sociales, celebrando la decisión y agradeciendo a Migración Colombia, así como al gobierno de los Estados Unidos por compartir la base de datos que permite detectar a los agresores sexuales.
“Uno más. Go home. En Medellín protegemos a nuestros niños, niñas y adolescentes. Cero tolerancia con la explotación sexual hacia ellos. Gracias al Gobierno de los Estados Unidos por compartir su base de datos de agresores sexuales. Gracias @MigracionCol”, fue el mensaje que escribió el mandatario local en su cuenta de X.
La expresión Go home
La expresión Go home ya había sido empleada por Gutiérrez justamente el pasado 7 de febrero, cuando Migración Colombia también dio a conocer que fue inadmitido uno de los pasajeros del avión procedente de Fort Lauderdale del estado de Florida, Estados Unidos, que aterrizó en el aeropuerto José María Córdova.
En esa ocasión se trataba de un ciudadano nacido en Ohio, del país norteamericano, quien intentaba ingresar a Medellín alegando intereses turísticos. Sin embargo, su ingreso fue bloqueado debido a una alerta Angel Watch, que lo señalaba como posible agresor sexual de menores de edad.
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Al mensaje de respaldo de Gutiérrez sobre esta decisión, se sumó el del presidente Gustavo Petro. “Posible agresor sexual de origen estadounidense es devuelto a su llegada a Medellín. Retornará a su país de origen”, escribió también en su cuenta de X.
Estos casos se han vuelto recurrentes en el aeropuerto José María Córdova como parte de las acciones que las autoridades han emprendido en contra de delitos contra menores de edad en Medellín, como la explotación sexual comercial. El foco en este caso está en evitar que extranjeros lleguen a abusar sexualmente de los menores de edad en complicidad con las redes de explotación locales, un problema aberrante que se salió de control en la pasada administración.
Las capturas de extranjeros por explotación sexual en Medellín durante el 2024 y la creación del grupo GESET
Hace poco las autoridades también confirmaron que en 2024, el primer año en el que se endurecieron los controles a los visitantes para evitar y castigar la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes, fueron capturadas 12 personas extranjeras, lo que representa un incremento del 1.100 % frente al año anterior, cuando solo hubo una persona capturada por este delito.
Asimismo, en 2024 se realizaron 23 capturas adicionales de extranjeros por delitos sexuales, con un aumento del 283% respecto a 2023, cuando hubo tan solo 6 capturas.
Para enfrentar estos delitos, en los que no solo están involucrados ciudadanos extranjeros, a lo largo del año pasado se creó el Grupo contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas (GESET), una unidad especializada que ha permitido articular esfuerzos con la Policía Nacional, la Fiscalía General, y agencias internacionales como la Embajada de los Estados Unidos, HSI e Interpol. Además, se implementó una línea de atención específica para apoyar a las víctimas, brindándoles una respuesta oportuna y eficaz.
Lo cierto es que las acciones también se han concentrado en terminales de transporte terrestre, hoteles, establecimientos nocturnos y otros lugares donde se debe controlar con contundencia el ingreso de menores de edad con adultos, mucho más si no son sus padres o acudientes responsables. Y la responsabilidad también le compete a la ciudadanía denunciando cualquier caso de este tipo de forma inmediata.
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