En el corregimiento San Sebastián de Palmitas, apenas a unos minutos del centro de Medellín, queda la finca de 70 hectáreas que el gobierno nacional le entregó este viernes a un grupo de firmantes de los Acuerdos de Paz con las Farc.
Estos pertenecen a la cooperativa Cotepaz, que recibió también un hotel en el municipio de Marinilla para que, igual que la tierra, lo incorporen a sus proyectos productivos de carácter productivo y turístico.
Ambos bienes estaban en poder de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y son producto de decomisos a organizaciones ilegales que los dedicaban a actividades ilícitas.
El acto de entrega contó con la participación del presidente de la SAE, Daniel Rojas; el gerente regional de la misma entidad, Mauricio Urquijo, representantes de la ONU, la Agencia para la Reincorporación Nacional (ARN) y líderes del partido Comunes.
“Hoy es un día de esperanza no solo para los firmantes sino para las víctimas a quienes invito a realizar los trámites legales correspondientes para solicitar bienes como parte de su reparación”, expresó Rojas.
“La entrega de este predio es más que la transferencia de un terreno; es la materialización de sueños, esfuerzos y colaboración. Este no solo representa un espacio físico, sino también la promesa de un futuro mejor para nuestras familias, para nuestras vidas”, dijeron por su parte voceros de Cotepaz, a la vez que pidieron que los gobiernos Distrital y departamental no les den la espalda en el proceso de incorporación social que están llevando a cabo.
En el Valle de Aburrá se han residenciado por lo menos 320 exguerrilleros de las extintas Farc que participaron en la dejación de armas en el año 2016.
La Cooperativa Multiactiva Tejiendo Paz (Cotepaz) es una de las organizaciones que estos han creado para rehacer sus vidas. Esta tiene varias líneas de trabajo, entre las que están pedagogía de paz, mujer y género y proyectos productivos.
En el último de estos enfoques mencionados poseen un taller para motos, una fábrica de estampados, una agencia de ecoturismo y memoria y un mercado campesino ubicado en el barrio Belén.
