La audiencia de formulación de acusación contra los implicados en el escándalo de presunta corrupción alrededor de Metroparques y el Inder en la anterior administración habría terminado sin pena ni gloria de no ser porque se reveló que un peso pesado del mundo jurídico y político nacional entrará a engrosar la defensa de una de las personas comprometidas con el caso.
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Esta diligencia era clave porque ahí la Fiscalía debía ampliar el relato de su acusación y mostrar las pruebas en contra de los procesados.
Hasta ahora en este proceso han sido imputados varios exfuncionarios de la administración del exalcalde Daniel Quintero: la exdirectora del Inder, Diana Paola Toro; los exgerentes de Metroparques Jorge Enrique Liévano y María Eugenia Domínguez, así como el representante legal de la firma Cyan Eventos y Logística, Mauricio Jaramillo.
Los cargos imputados hasta ahora son asociación para cometer delitos contra la administración pública, contrato sin cumplimiento de requisitos legales, interés indebido en contratos y peculado por apropiación.
Esto, por hechos relacionados con el presunto direccionamiento de un contrato por casi 22.000 millones de pesos en favor de la empresa mencionada.
La diligencia de este 4 de abril estaba programada para las 9:00 de la mañana de manera virtual por parte de un juzgado penal del circuito de Medellín y de hecho comenzó; sin embargo, en un aparte inicial, fue pedido el aplazamiento debido al relevo en la defensa de Jaramillo.
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Hasta ahora el empresario venía siendo representado por el jurista Sebastián Erazo Camargo, de la firma bogotana OBM Law, quien estuvo presente en la audiencia pasada. Pero, a partir del primero de abril, fue relevado por el exfiscal Eduardo Montealegre Lynett.
Por supuesto, la entrada en escena de un abogado tan connotado significa que Jaramillo asume un costo alto para buscar comprobar su inocencia, lo cual contrasta con la situación de su compañía, que a mediados del año pasado pidió ser admitida en ley de insolvencia económica.
