Son cada vez más los países latinoamericanos que tocan la idea de plantear un modelo distinto de lucha contra el narcotráfico, tras los experimentos vistos en lugares como Estados Unidos, Uruguay, Canadá y Países Bajos.
De hecho en años anteriores, en nombre de Colombia, uno de los países que más ha sufrido el asunto, el saliente presidente Juan Manuel Santos lo propuso varias veces ante las Naciones Unidas: “después de tantas vidas segadas, después de tanta corrupción, después de tanta violencia, ¿podemos decir que ganamos esta guerra? ¿Podemos decir por lo menos que la vamos ganando? La repuesta infortunadamente es que no. No la hemos ganado ni la estamos ganando. Hay que repensar y dejar atrás la receta basada en la represión”.
El tiempo pasó y su propuesta quedó solo en palabras, sin mucho apoyo en las demás naciones. Pero tras la elección de Andrés Manuel López Obrador, en México el 1 de julio, otro de los países más golpeados por el narcotráfico está considerando un camino alternativo.
Así lo hizo saber Olga Sánchez Cordero, futura secretaria de Gobernación tal como prevén los medios del país: “recibí de Andrés Manuel una carta abierta para hacer lo que sea necesario para pacificar el país. Debe irse avanzando en la propuesta de la legalización de la droga. Él sabía perfectamente de mis artículos en la prensa sobre la despenalización, me dijo textual: ‘abramos el debate’”.
Esta posible política se enmarcaría en una estrategia de menor represión, que contempla una amnistía a criminales menores, y un modelo de justicia transicional para acercar la verdad sobre miles de casos no esclarecidos de crímenes del narcotráfico.
¿Qué opinan expertos y qué efectos podría dejar un escenario como ese? Respecto al ámbito interno en México, Héctor Aguilar, columnista del diario Milenio y analista político, consideró que “se trata de la cara más realista para afrontar este problema ante el que hay mínima capacidad de respuesta. De cualquier forma, esto está lejos de ser fácil e inmediato, pero puede ser una solución al largo plazo quitarle la renta a estas mafias”.
Sobre la región, John Marulanda, consultor internacional en seguridad, afirmó que “sin duda sería un paso trascendental en la lucha contra el narcotráfico, pero hay que tener en cuenta que los carteles de ese país trabajan con el producido de Colombia, y que el consumo está en alza en otras partes del mundo. Por ende, lo de México tendría que estar coordinado con otros países. Lo que debería hacer el gobierno colombiano es esperar la propuesta mexicana e intentar enlazarse a ella. Porque de nada vale si eso hace México mientras que en otros países cruciales, se sigue prohibiendo”.