Con una buena noticia amanecieron la mañana de este sábado 59 familias colombianas cuyos hijos, esposos y padres fueron apresados en Venezuela entre finales de agosto y comienzos de septiembre de 2016 por estar indocumentados.
Por fin, tras casi tres años lejos de sus seres queridos, fueron liberados por el gobierno de Nicolás Maduro y se preparan para ser deportados a Colombia.
Puede ver: Las 59 vidas colombianas que Maduro tiene presas
Aunque desde migración Colombia aún no validan la decisión, EL COLOMBIANO confirmó la noticia con Edith Barrios, madre de Emerson González, uno de los jóvenes detenidos. A Barrios su hijo la llamó en la mañana contándole que él y sus compañeros ya estaban en preparativos para ser trasladados a Cúcuta desde Caracas. La ONG Foro Penal, de presos políticos, también reseñó por medio de sus redes sociales la buena nueva.
“Lo primero que vamos a hacer cuando llegue es llevarlo al médico para que se haga un chequeo de su salud”, cuenta con felicidad Edith. Su hijo estuvo presentando quebrantos durante los casi tres años que estuvo apresado: constantes fiebres y dolores en su cuerpo hicieron aún más insufrible su encarcelamiento.
Aunque al principio el número de personas detenidas por las fuerzas venezolanas fue de 92, poco a poco y por razones humanitarias, algunos fueron siendo liberados. Al día de hoy solo los 59 colombianos continuaban presos.
Puede ver: Así viven los 59 colombianos presos en Venezuela
Si bien en un primer momento la razón de su detención se dio por no portar los documentos en regla, Nicolás Maduro lanzó graves acusaciones en contra de los colombianos, señalándolos de ser paramilitares, palabras que fueron rechazadas no solo por las familias de los implicados sino por organizaciones humanitarias de todo el planeta y por el gobierno y cancillería de Colombia.
Hoy la larga espera por fin llega a su fin. Para Edith y para las restante 58 familias, que por fin podrán ver a sus hijos junto a ellas. Emerson González y sus compañeros llegarán a Cúcuta y al parecen serán recibidos por las autoridades colombianas.
“Él pidió ver a sus hijos. Lo capturaron justo cuando iba a viajar hacia Colombia. Aunque él era residente en Venezuela, no creo que sea posible volver. Para nosotros mejor que se quede”, finaliza la madre feliz.
