Israel deportó a 171 activistas más que fueron detenidos mientras participaban en una flotilla de ayuda con destino a Gaza, incluida la activista sueca Greta Thunberg.
El Ministerio de Relaciones Exteriores dijo en una publicación en X que otros “171 provocadores de la flotilla Hamás–Sumud, incluida Greta Thunberg, fueron deportados hoy de Israel a Grecia y Eslovaquia”.
La cancillería israelí agregó que los deportados eran ciudadanos de varios países, entre ellos de Grecia, Italia, Francia y Estados Unidos.
En contexto: ¿Cómo terminaron dos colombianas en la flotilla que llevaba ayuda a la Franja de Gaza?
La flotilla Global Sumud (resiliencia en árabe) partió a comienzos de septiembre de Barcelona con la intención de llevar ayuda a la Franja de Gaza, el territorio palestino que, según la ONU, sufre una hambruna.
Sin embargo, Israel impone un bloqueo naval alrededor de este enclave, donde desde hace casi dos años libra una guerra con el movimiento islamista palestino Hamás.
La Marina israelí interceptó los barcos en aguas internacionales y detuvo a sus cientos de activistas, procedentes de decenas de países, entre ellos Argentina, Brasil, Colombia, México y España.
El domingo, los primeros 21 de los 49 activistas españoles que integraban la flotilla de ayuda a Gaza interceptada esta semana por Israel aterrizaron en el aeropuerto de Madrid, donde denunciaron haber sido maltratados y recibido un trato “humillante” durante su detención.
España es una de las voces más críticas en Europa contra la ofensiva militar de Israel en Gaza, iniciada en respuesta al ataque del 7 de octubre de 2023 de Hamás en territorio israelí.
“Los maltratos físicos y psicológicos han sido repetidos durante todos estos días. Nos han golpeado, nos han arrastrado por los suelos. Nos han vendado los ojos. Nos han atado de pies y manos”, aseguró a los periodistas Rafael Borrego, uno de los integrantes de la flotilla, sobre la detención en Israel.
Incluso, el Gobierno de Israel contestó a las denuncias de presuntos maltratos a Thunberg y a otros activistas durante su arresto. “Las acusaciones sobre el maltrato a Greta Thunberg y otros detenidos de la flotilla Hamás-Sumud son mentiras descaradas. Greta tampoco denunció ante las autoridades israelíes ninguna de estas acusaciones absurdas e infundadas, porque nunca ocurrieron”, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel en X.
Decenas de simpatizantes esperaban a los activistas que desembarcaron vestidos de blanco en el aeropuerto de Madrid al inicio de la noche. Otros —como la exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau— continuaron directamente hacia la capital catalana, donde les espera un recibimiento por parte de sus colectivos.
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, había anunciado en la mañana que se había alcanzado un acuerdo con Israel para que un primer grupo de 21 activistas españoles pudiera volar de regreso este domingo.
Estos primeros 21 activistas españoles deportados son los que accedieron a firmar un documento en el que aceptan que han entrado ilegalmente a Israel, indicó el ministro.