Los científicos de la Agencia Espacial Europea (ESA) quedaron impresionados por un descubrimiento considerado de los más importantes en el último siglo. Se trata de un agujero negro que tiene de tamaño 33 veces superior al Sol.
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Este espacio de materia extremadamente densa forma parte de un sistema binario, y se llama Gaia BH3, además se ubica en el segundo más grande visto en la galaxia por encima de Cygnus X-1 y Gaia BH1. Este agujero está a tan solo 2.000 años luz de la Tierra.
Para detectar este supermasivo, los investigadores utilizaron la nave Gaia, que mapea las posiciones y movimientos de más de 2.000 millones de estrellas en la galaxia, pero cuando orbitaban por el sitio donde estaba el agujero, no creían lo que veían hasta comprobarlo observando su estructura y la medida precisa de su masa.
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Los astrónomos de París aseguraron que este es el tipo de descubrimiento se hace una sola vez en la vida. El trabajo fue divulgado por Pasquale Panuzzo del Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS) del Observatorio de París.
“Nadie esperaba encontrar un agujero negro de gran masa acechando cerca, sin ser detectado hasta ahora”, dijo Pasquale Panuzzo a través de un comunicado de la organización.
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“De acuerdo con Nemmen, para comenzar a entender a los agujeros negros es necesario recurrir a la Teoría General de la Relatividad de Albert Einstein. A inicios del siglo XX, el físico alemán propuso que el universo existía en una geometría cuatridimensional conocida como espacio-tiempo: “Einstein introdujo la noción de que el tiempo no era absoluto, pero que también sería una dimensión (con profundidad, anchura y altura), lo que lo vuelve relativo, por eso el nombre de la teoría (sic)”, según indicó National Geographic.