A la textilera Fabricato le están llegando los buenos tiempos: le faltan cancelar obligaciones por 3.329 millones de pesos de la Ley 550, lo que le permitirá avanzar en su plan de modernización y acaba de anunciar que se ganó un contrato de 11,2 millones de dólares para abastecer de uniformes al Ejército de Chile.
Las entregas comenzarán entre finales de septiembre y principios de octubre, y terminará en marzo de 2012.
"Son unas 70.000 unidades en este primer contrato, cada uno de ellos compuesto por un pantalón, un chaquetón y un gorro, o sea que estamos hablando de 210.000 prendas en conjunto", explicó el presidente (e) de Fabricato, Juan Carlos Cadavid Gómez.
Eso no quiere decir que Fabricato vestirá a la totalidad de las fuerzas militares del país austral, ya que los contratos para proporcionar uniformes suelen asignarse por pedidos parciales.
Sin embargo, se convierte en una victoria importante, teniendo en cuenta que pujó junto a proveedores chinos, quienes se han convertido en la mayor competencia para las confecciones nacionales.
Para Cadavid Gómez, el acuerdo "es una puerta de entrada que se abre con el gobierno chileno y una carta de presentación" para concretar negocios similares con otros países. De hecho, Fabricato ya elabora prendas para las Fuerzas Militares de Ecuador, Perú y Colombia.
La textilera tiene como meta salir antes de lo previsto de la llamada Ley de Reactivación Económica, lo que le facilitará obtener los recursos para financiar inversiones por 30 millones de dólares.
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