Triste fue la despedida del Envigado Fútbol Club de la Liga Postobón-I. La caída 1-2 de local ante Deportivo Cali evidenció el discreto semestre que tuvo y le ratificó que tiene muchas cosas por replantear para el próximo campeonato.
Una jugada colectiva, que incluyó un taco para dejar sin opción a los zagueros Andrés Orozco y Andrés Cadavid, fue capitalizada por Edixon Perea cuando apenas iniciaba el segundo tiempo en el Parque Estadio Sur. La igualdad llegó a los 75 minutos con Cristian Arango. Y cuando finalizaba el juego, a los 92, Lizarazo puso el 2-1 definitivo para la visita.
Aunque el presidente Felipe Paniagua prometió “el debido análisis de la temporada”, el elenco naranja tuvo múltiples falencias en la definición y por ello ajustó la cuarta eliminación consecutiva de la semifinal del torneo.
