Aunque Coldeportes no tiene competencia para investigar y sancionar al personal técnico contratado por las federaciones deportivas nacionales, este organismo rechazó el escándalo en el que se vio involucrado el técnico de la selección colombiana de fútbol de mayores, Hernán Darío Gómez y que finalmente lo llevó a renunciar a su cargo.
En un comunicado se unió a las voces de reproche sobre el hecho y afirmó que "se une a las voces de repudio en contra de cualquier hecho o manifestación violenta por parte de personas allegadas al deporte que atenten contra la integridad personal de cualquier individuo y contra la convivencia y respeto que deberá rodear la actividad deportiva".
Así mismo exhortó a la comunidad deportiva a "ser la principal garante del respeto hacia los derechos de los demás".
Coldeportes reiteró que ningún hecho que atente contra la integridad de las personas puede ser admisible, pero consideró que es más grave cuando son protagonizados por figuras públicas.
