La cercanía de Nora Moreno es un aliciente más para Jossimar Calvo, quien a sus 22 años vivirá hoy, desde las 8:00 a.m., el día más importante de su carrera. La mamá del gimnasta cucuteño viajó a Río de Janeiro con dinero aportado por su hijo y, aunque alimenta el sueño de una medalla, prefiere esperar con tranquilidad a “que se haga la voluntad de Dios”.
Ella asegura que, junto al entrenador Jairo Ruiz, ha conformado un equipo de trabajo que permitió la proyección del deportista, que este sábado podría escribir otro capítulo inédito en la historia de la gimnasia artística nacional.
La mujer acompaña, por primera vez, a Jossimar a una competencia fuera del país y cuenta que se hará lejos para no desconcentrarlo.
En su debut olímpico, Calvo buscará la clasificación a las finales de paralelas, barra fija y all around. En los dos primeros aparatos avanzan los ocho mejores y en la tercera competencia pasan los 24 puntajes más altos.
Jorge Hugo Giraldo, tres veces Olímpico, es optimista de una buena figuración de Jossimar: “le tengo mucha fe, ha evolucionado en los entrenamientos y chequeos, y le veo opción en paralelas y barra fija, y en la general puede estar entre los 10 primeros. Lo fundamental es meterse a finales que, a veces, es más difícil que ganar medalla”.
Juan Navor Medina, vocero de la Federación y presente en las justas, advierte que Calvo “está muy bien física y mentalmente”. Y añade que por sorteo le tocó la primera subdivisión, en la que están, entre otros, Japón, Holanda y Cuba, “que históricamente es dura por la exigencia de los jueces”.
La última vez que hablaron, Jossimar le dijo a su colega y amigo Johnny Muñoz que iba a gozarse y a disfrutar los Juegos. “Pero en el fondo sabe que puede alcanzar un podio porque tiene calidad”.