Dos aspectos en particular marcan el destino de las ligas deportivas en Colombia. El primero es que para ser presidente se requieren cosas mínimas, como ser colombiano, mayor de edad y hacer un curso de 40 horas sobre administración deportiva, que es gratuito. El segundo tiene que ver con que ese trabajo es ad honorem.
Según lo expuesto por el metodólogo Alejandro Navarro, el 80% de los presidentes y miembros de las juntas directivas de las ligas no reciben salario y por ello tras sus labores profesionales dedican tiempo a las ligas. Además, muchos de ellos son padres de familia que decidieron vincularse en el sistema para luchar, junto a sus hijos, por sus sueños deportivos.
Solo algunas ligas tienen presupuestos que les permite ser administrativamente sostenibles, caso de fútbol ($5.000 millones), tenis de campo ($2.000 millones) y natación ($8.200 millones).
En natación, por ejemplo, cuentan con presidente, vicepresidente, tesorero, vocal, gerente y secretaria, además de una planta administrativa grande; igual pasa en tenis de campo que tiene 30 personas contratadas para temas administrativos, deportivos y operativos; mientras que en otras organizaciones solo le pueden pagar a la secretaria.
Héctor Monroy, director ejecutivo de la Liga de Tenis, sostiene que gracias a la venta de servicios (cursos, organización de torneos, prácticas dirigidas y convenios empresariales y escolares) recaudan $2 mil millones de presupuesto con el que trabajan en el año.
Antioquia tiene 40 ligas de deporte convencional y cinco de paralímpicos. De estas, solo 6 (natación, fútbol, tenis de campo, arquería, ciclismo y patinaje), es decir el 13% de ellas, tienen procesos administrativos y deportivos exitosos con buenos resultados en ambas áreas.
Los resultados deportivos están soportados en las cifras que maneja Indeportes en medallería, según Mariella Jaramillo, coordinadora de metodólogos, ratifica que fueron las disciplinas con mayor número de medallas de oro en las justas de 2015.
En beneficios, las ligas, todas sin excepción, reciben recursos de Indeportes para temas como contratación de entrenadores, viajes a competencias, nutrición y ayudas científicas, dineros que llegan en porcentajes diferenciados según la categoría que tenga cada jerarca.
Tras la planificación anual y la categorización, las ligas con mejor resultado deportivo tienen mayor apoyo, al igual que aquellas en las que Indeportes quiere fortalecer los procesos. Las demás deben apelar a la gestión de recursos propios para subsistir