El presidente del Real Madrid dijo que si no fuera por el voto de algunos periodistas de naciones que tienen poco peso en el fútbol, Vinicius se hubiera quedado con el galardón.
El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, no ha ocultado su descontento tras la reciente entrega del Balón de Oro, otorgado al mediocampista español Rodri. En una conferencia llena de declaraciones polémicas, Pérez arremetió contra la UEFA y el sistema de votación, defendiendo que el galardón debería haber recaído en Vinicius Jr., estrella del conjunto merengue.
Pérez comenzó su discurso reconociendo el talento de Rodri, pilar fundamental del Manchester City y la selección española, pero dejó claro que el premio no correspondía al nivel mostrado por otros jugadores del Real Madrid. Según el dirigente, tanto Vinicius como Jude Bellingham y Dani Carvajal habían hecho méritos superiores para recibir el reconocimiento.
“Vinicius fue determinante en los momentos cruciales, liderando al equipo con actuaciones brillantes. Bellingham ha revolucionado el fútbol europeo este año, y Carvajal es un ejemplo de consistencia. ¿Qué más necesitan hacer para ser considerados?”, cuestionó Pérez, visiblemente molesto.
Uno de los puntos más criticados por Florentino Pérez fue la alteración en las normas de votación. Según explicó, este año los periodistas eligieron a 10 futbolistas en lugar de 5, y los puntos asignados al primer clasificado aumentaron de 6 a 15. Además, se amplió el jurado a incluir representantes de países con menor tradición futbolística, algo que, según Pérez, influyó negativamente en los resultados.
“Si no hubieran votado periodistas de Namibia, Uganda, Albania y Finlandia, Vinicius sería el ganador. ¡Ni un solo voto para Vinicius desde esos países! Al menos el periodista finlandés dimitió y prometió no volver a ser jurado. Le agradezco el gesto, pero el daño ya está hecho”, declaró.
El sistema de este año permitió la participación de periodistas de los 100 países mejor clasificados en el ranking FIFA, lo que incluyó naciones con menos de un millón de habitantes y dejó fuera a otras como India, con más de 500 millones de aficionados potenciales.
Para Pérez, el problema radica en la falta de credibilidad del proceso y la influencia de la UEFA, organismo al que acusó de interferir en la elección. Propuso que los votos para el Balón de Oro sean emitidos únicamente por personas de reconocido prestigio, como seleccionadores nacionales, quienes también ponen en juego su reputación al emitir sus juicios.
“El Balón de Oro debe ser independiente. Necesitamos un sistema transparente, con votantes que el mundo conozca y respete. No sabemos quiénes son los jurados actuales ni cuáles son sus criterios. Por eso, el Real Madrid decidió no asistir a la gala este año”, concluyó Pérez.
Estas declaraciones avivan la tensión entre Florentino Pérez y la UEFA, una relación que ya se ha visto marcada por conflictos como la Superliga Europea. Mientras tanto, la polémica sobre la entrega del Balón de Oro deja una sombra sobre uno de los premios más prestigiosos del fútbol mundial.
La postura del presidente del Real Madrid plantea preguntas importantes sobre la equidad y la transparencia en los procesos de votación, y si la UEFA tomará medidas para abordar estas críticas o simplemente se limitará a defender su sistema actual.
