Las dos figuras de la Selección de Colombia fueron homenajeados este lunes en el municipio de Amalfi, lugar donde nació Muñoz.
Cuando el helicóptero apareció en lo alto de las montañas de Amalfi, la algarabía se apoderó de la Unidad Deportiva Gonzalo Trujillo Vásquez.
En ese instante, los niños, a quienes les dieron permiso en sus colegios para salir antes de tiempo y poder conocer a estos ídolos; sus padres, y otros lugareños de este y otros municipios del Nordeste de Antioquia, empezaron a gritar de la emoción.
Y no era para menos, pues en aquella aeronave estaban a punto de aterrizar dos referentes de la Selección Colombia de Fútbol, Daniel Muñoz y Luis Díaz, recientes subcampeones de la Copa América en Estados Unidos.
Daniel, quien es de Amalfi, población conocida como la tierra del tigre, retornó al lugar donde nació hace 28 años y en el que fue recibido como un héroe.
Luego, en caravana, fue llevado al escenario deportivo, el mismo en el que muchas veces jugó y exhibió su talento.
Allí, con un equipo de amigos, entre ellos Neider Morantes, Samuel Vanegas, Camilo Giraldo, el papá de Richard Ríos (Neimar Ríos), entre otros, y contra Felinos, equipo de Amalfi, se aprestaban luego para jugar un partido de fútbol y brindarle más alegrías al público asistente.
“Estamos muy agradecidos por la invitación, siempre voy a estar acá siempre para apoyarlos, y que sigan soñando. Siempre le pido a Dios por ustedes, por esta tierra para que nazcan y se den muchos deportistas profesionales, nunca deje de soñar que los sueños sí se cumplen”, dijo Daniel a los asistentes.
Mientras que Lucho Díaz se mostró feliz por el cariño, por el recibimiento y confirmó que siempre que su amigo Daniel Muñoz lo invite va a estar allí apoyando el deporte de Amalfi.
“Agradezco la invitación, con mi amigo Daniel sabe que cuenta conmigo para lo que necesite siempre y feliz de estar acá con los niños y con todos ustedes”, concluyó el extremo de la Selección Colombia.
