Berlusconi venderá el Milan a inversionistas chinos

El presidente y propietario del Milan, Silvio Berlusconi, confirmó que venderá el equipo a un grupo de inversores chinos. FOTO REUTERS

El presidente y propietario del Milan, Silvio Berlusconi, que salió este martes del hospital en el que fue operado por un problema de corazón el pasado 14 de junio, confirmó que venderá la entidad a un grupo de inversores chinos que permitirá al club “volver a ser protagonista en Italia, en Europa y en el mundo”.

“La última decisión ha sido importante: decidí vender el Milan a quién esté dispuesto a invertir dinero para permitir al club volver a ser protagonista en Italia, en Europa y en el mundo”, afirmó Berlusconi, en declaraciones recogidas por medios locales.

“Renuncié a mis peticiones económicas, acepté lo que me ha sido propuesto, que ni siquiera toma en cuenta el valor de la marca Milan, pero quise que el grupo chino aceptara invertir en el Milan por lo menos 400 millones de euros en los próximos dos años”, agregó.

El máximo representante rossonero dejará al Milan tras 30 años de presidencia en los que marcó una época, al conquistar 5 Ligas Campeones y 28 trofeos totales.

Desde 1986, el Milan contó con jugadores como los holandeses Marco Van Basten y Ruud Gullit, el ucraniano Andry Shevchenko, los brasileños Rivaldo, Ronaldinho, Ronaldo, Ricardo Kaká o el ucraniano Andy Shevchenko, entre otros.

“Estuve un período de 26 años, que al final fueron 30, pero en los últimos años no seguí al Milan como lo hice en el pasado. Quiero cerrar un período de 30 años con 28 grandísimos trofeos, con muchas segundas plazas y con una afición rossonera que aumentó en número”, destacó Berlusconi.

Tras el Scudetto y la Supercopa conquistados en 2011, el Milan no volvió a ser competitivo a altos niveles, debido a las dificultades económicas de la sociedad, lo que llevó a Berlusconi a la decisión de separarse definitivamente del club milanés.

El empresario y político italiano, que estuvo internado en el hospital San Raffaele de Milán desde el pasado 7 de junio, admitió que su operación al corazón fue una “prueba muy dolorosa”.

“Ha sido una prueba muy dolorosa, no pensaba que hubiera sufrido tanto. Ahora estoy un poco mejor, me esperan dos meses de rehabilitación y luego estaré de nuevo a disposición de Italia y de los italianos”, declaró Berlusconi.