Las históricas estatuas de los budas Bamiyan de Afganistán, que fueron reducidas en escombros por los Talibanes en 2001, fueron “reconstruidas” con tecnología por una pareja de chinos.
Las monumentales esculturas, que en algún momento fueron los budas más altos del mundo, volvieron a su sitio desde el pasado 13 de junio gracias a Janson Yu and Liyan Hu, quienes se valieron de un proyector láser 3D para evocar la representación.
Con un tamaño de 55 y 37 metros de altura y talladas a mano en el siglo VI, las efigies fueron monumentos históricos reconocidos por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad que representaban a los monjes budistas del valle Bamiyan.
Sin embargo, desde su destrucción por parte del gobierno islamista talibán las estatuas de los Bamiyan entraron a formar parte de la lista de Patrimonio en de la Humanidad en peligro.