Stiven Medina, conductor de una turbo, botó la carga de maíz que transportaba ante el susto por el desplome de la estructura a unos metros de donde se encontraba su vehículo.
El temor en la voz de Stiven Medina reflejó el de las decenas de personas y conductores que se encontraban cerca del puente El Alambrado que colapsó este miércoles dejando dos muertos e incomunicados por una de sus conexiones principales a los departamentos del Quindío y el Valle del Cauca.
Aún asustado por el hecho, el conductor de un vehículo tipo turbo tomó su celular y grabó la impresionante escena: el puente colapsado y sobre él, dos vehículos, de los que una persona salía cojeando.
Stiven, sin soltar su teléfono le dio ánimos al hombre herido y le ofreció agua para recuperarse del susto. Luego, mostró la escena que su vehículo dejó en el corredor vial: un reguero de maíz producto de la maniobra que tuvo que hacer para no ir a parar en el puente ya caído.
“Tengo un reguero de maíz porque pegué una frenada en seco porque se acaba de caer el puente”, se le escuchó decir a Stiven, que minutos antes ayudó a socorrer a uno de los heridos.
Sobre el puente, ya colapsado, quedaron dos mulas, una turbo que pertenecería a la Policía, y un carro particular.
El gobernador del Quindío, Roberto Jairo Jaramillo, confirmó la muerte de dos policías, un intendente y un patrullero, en el desplome del puente. Se trata del intendente José David Márquez Flórez y el patrullero Nelson Fabián Salgado Pérez, que pertenecían a la Escuela Simón Bolívar de Tuluá.
El Instituto Nacional de Vías, Invías, informó que “por fallas en la estructura del puente” hay cierre total en la vía Armenia - La Paila en ambos sentidos. Esta carretera es la más transitada por los vehículos de carga que vienen del centro del país por La Línea y que buscan conectar con el puerto de Buenaventura.
