‘Coqueteo’ de Petro agudiza división en Alianza Verde

Crece disputa entre quienes apoyan el Pacto Histórico, los que piden libertad y los que buscan separación.

La senadora Sandra Ortiz (centro) no hará parte de la Terna Verde, junto a Antonio Sanguino y Carlos Amaya. FOTO Colprensa

La Terna Verde, la estrategia con la que tres precandiatos del partido Alianza Verde buscaban consolidar un proyecto político propio, quedó incompleta tras el retiro de la senadora Sandra Ortiz. Este lunes publicó un vehemente comunicado, en el que advierte que las candidaturas de las mujeres se siguen considerando como “un relleno”.

Aunque muchos en su propio partido pensaron que salía de la contienda presidencial, su retiro fue parcial. Según confirmaron sus allegados, su campaña a la Presidencia sigue en pie, pero sin la compañía del exgobernador de Boyacá, Carlos Amaya, y el senador Antonio Sanguino, los otros dos precandidatos de la fallida Terna Verde.

Este fue el último desencuentro que hubo en el partido, que en los últimos dos meses se ha acostumbrado a las disputas internas. De hecho, las diferencias entre quienes apoyan a la Coalición de la Esperanza y quienes son más cercanos al Pacto Histórico, de Gustavo Petro, siguen sin resolverse.

El viernes pasado, uno de los tres copresidentes de Alianza Verde, cuatro representantes y cuatro senadores firmaron una carta junto a miembros del Pacto Histórico –la coalición de izquierda–, para invitar a la unidad a todos los sectores alternativos.

Según le contó a EL COLOMBIANO Katherine Miranda, una de las representantes que firmaron la misiva, esta invitación no solo estaba dirigida a los miembros de su partido, sino también era un llamado a los integrantes de la Coalición de la Esperanza.

La propuesta, sin embargo, no cayó bien en los otros sectores de la colectividad. “La unidad no se decreta, la unidad se construye”, dijo el senador Antonio Sanguino. “Los amigos verdes no pueden firmar una carta invitándonos a la unidad cuando a la vez hubo sectores del Pacto Histórico que le pusieron una denuncia penal a Claudia (López)”, argumentó Sanguino.

Por su parte, la representante Miranda advirtió que las elecciones presidenciales no pueden limitarse solo a lo que sucede en Bogotá. “Como no se apoya a Claudia López, entonces no vale la pena hacer parte del ‘combo’. Eso me parece mezquino”, opinó la representante; y señaló que en la Coalición de la Esperanza es muy cercana a Carlos Fernando Galán, quien ha sido uno de los críticos más acérrimos que ha tenido López desde el Concejo de Bogotá.

Pero la disputa no para ahí. En una nueva carta varios parlamentarios piden que haya libertad dentro de Alianza Verde para apoyar a los candidatos presidenciales que prefieran de cara a la primera vuelta en mayor de 2022. El documento contó con el apoyo de congresistas como Katherine Miranda, Jorge Londoño, Inti Asprilla, Yezid García, Aulo Polo y Leon Fredy Muñoz.

El senador Jorge Londoño aseguró que esta posibilidad ha sido una condición tradicional en Alianza Verde, pues ya se ha hecho en elecciones pasadas. Sin embargo, Sanguino dijo que se trata de una “solicitud desafortunada y de mal recibo”. Para él, esta posición significa que se estaría objetando a los candidatos de la Alianza Verde y revelaría una falta de vocación de poder, pese a que se trata de la “principal fuerza de oposición del país”.

Estas rencillas llevaron a que la senadora Angélica Lozano hiciera la propuesta de escindirlo, y aunque varias fuentes de la colectividad le dijeron a EL COLOMBIANO que ella se retractó en conversaciones internas, el fantasma de ese proceso sigue rondando.

Por lo pronto, Alianza Verde adelanta una encuesta interna que busca determinar cuáles son las opiniones de los militantes y cuál podría ser su rumbo de cara a las elecciones de 2022.

Sus resultados, sin embargo, no son vinculantes y parece que no resolverán las diferencias que a la luz de hoy parecen irreconciliables.