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Tras ocho días de haber anunciado el cese unilateral de hostilidades ante la pandemia de coronavirus que afecta a Colombia, “no se han registrado acciones ofensivas” atribuidas al Eln, que violen ese propósito. Así lo concluyó el Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac).
La suspensión de la actividad armada, que según la guerrilla irá hasta el 30 de abril, viene siendo monitoreada por el Cerac de manera independiente. De acuerdo con la entidad, ya son 24 días transcurridos sin que se conozcan acciones violentas de ese grupo.
Sin embargo, sí se tuvo conocimiento de un combate entre el Eln y el Clan del Golfo en zona rural de Bojayá, Chocó, el pasado 5 de abril. “A raíz del enfrentamiento se registró un desplazamiento forzado de integrantes de las comunidades indígenas Embera Dobida, Katío, Chamí y Guna Dule del resguardo Pichicora”.
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Y aunque el alto comisionado de Paz, Miguel Ceballos, afirmó que “es absolutamente evidente que si hay combates en la zona del Chocó, es porque no hubo cese al fuego”, el Cerac consideró que el hecho no representa una violación por parte de ese grupo, pues “se desconoce si la iniciativa del encuentro violento partió de la guerrilla” o de su contrincante.
El Cerac también registró tres acciones que ocurrieron en zonas donde el Eln hace presencia, aunque no fueron atribuidas a ese grupo.
La primera consistió en amenazas de muerte que fueron proferidas contra aquellas personas que violaran el aislamiento preventivo en Barbacoas, Llorente y Tumaco, Nariño. El hecho ocurrió el 5 de abril, pero el grupo armado que lo cometió no fue identificado.
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La segunda, fue el ataque a disparos contra un vehículo en que se transportaba una misión médica en zona rural de Tumaco, acción que tuvo lugar el 4 de abril, en la que fallecieron dos personas y otras dos resultaron heridas.
Y la tercera fue el secuestro de dos auxiliares de Policía en la vía Teorama-Ocaña, en el Catatumbo, el pasado 1 de abril. Hasta el momento se desconoce el paradero de los uniformados y ningún grupo armado ha reclamado la autoría del hecho.
“Estos hechos deben ser objeto de verificación para descartar la eventual responsabilidad del Eln. En esas zonas operan también otros grupos como el Clan del Golfo y las disidencias de las Farc conocidas como Óliver Sinisterra y Guerrillas Unidas del Pacífico”, concluyó el Cerac