Con cerca de 300 iniciativas, entre proyectos de ley y actos legislativos, radicados hasta diciembre pasado en el Congreso, el período legislativo que se avecina promete ser de arduo trabajo y debate para los legisladores, además hay que tener en cuenta que los proyectos pendientes de trámite no son de poca monta.
Es por eso que a poco menos de un mes que el Congreso sea convocado a sesiones extraordinarias para discutir el Plan Nacional de Desarrollo, con una agenda legislativa que incluye temas de interés nacional como la reforma de poderes, el fuero militar y el uso medicinal del cannabis, EL COLOMBIANO indagó sobre lo que hacen los congresistas durante el tiempo de receso legislativo.
Para el director de la facultad de Ciencias Políticas de la UPB, Luis Guillermo Patiño, este debe ser un período de estudio que sirva para adelantarse a la agenda del Gobierno y del Congreso y para preparar los debates que tanta falta hacen el país.
Asimismo, indicó el académico, “este receso lo deberían utilizar para acercarse a la gente, a sus problemas, para identificar los proyectos estratégicos de los departamentos y llegar así con nuevas propuestas al Capitolio”.
Lo que la ciudadanía espera, es que bochornosos episodios como el del excongresista Simón Gaviria, quien admitió que había leído apenas por encima la conciliación de la fallida reforma a la justicia, no se repitan, y los padres de la patria hagan un análisis juicioso de las leyes que se debaten.