Por más de 30 horas, con un breve periodo para ir a descansar, José Luis Mosquera se instaló en las afueras de Medicina Legal, en Medellín, para que le permitieran identificar a los cuatro familiares que perdió en el deslizamiento de la vía Medellín-Quibdó. Algo similar vivieron las más de 40 familias que fueron a identificar a aquellos de quienes se confirmó su muerte o a buscar si entre las víctimas había alguien de quien no se sabía su paradero.
Jose Luis llegó desde las 6:00 a.m. del pasado sábado a la morgue, en el barrio Caribe, de Medellín, cuando supo que entre las miles de toneladas de tierra que cayeron en el sector El 17, en El Carmen de Atrato, Chocó, quedaron los cuerpos de su esposa, su hijo de 18 meses de nacido, su cuñada y la hija de su cuñada, además de su mascota.
“Ella tenía mucho afán por venirse a Medellín porque ella era profesora. Se vinieron en la madrugada y tipo 8:30-9:00 a.m. se detuvieron por un deslizamiento en medio de la carretera. Cuando intentaron devolverse, se presentó otro y quedaron encerradas”, relató José Luis en las afueras del instituto forense nacional.
Con el paso de las horas decidieron refugiarse en el restaurante que estaba ubicado en la mitad del camino, justamente sobre el cual cayó la tierra que dejó sepultadas a más de 60 personas, entre las que se encontraban los familiares de este hombre: Ailyn Marcela Andrade (esposa), Jeylen Daniel Mosquera (hijo), Ana Victoria Andrade (cuñada) y Hessy Daniela Bejarano Andrade (hija de la cuñada).
En el transcurso de la mañana aparecieron, uno a uno los cadáveres de estas cuatro personas, quienes fueron trasladadas a Medellín en dos grupos: Jeylen Daniel, de 18 meses, y Hessy Daniela llegaron desde las 11:00 a.m. del sábado a Medellín, mientras que Ailyn Marcela y Ana Victoria lo hicieron en el grupo que aterrizó en un helicóptero de la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) a las 8:00 p.m. del mismo día.
Mientras arribaban los cuerpos a la ciudad, los habitantes del barrio Aures, en la comuna 7 (Robledo), le rindieron un homenaje a Ailyn Marcela, quien se desempeñaba como docente de la Institución Educativa Gerardo Valencia Cano, sede La Portada, en los grados de primaria.
En el sector la recordaron como una persona que solía darles consejos a los niños para que mejoraran su calidad de vida y destacaron que era una persona muy amable y entregada a la formación de sus niños, con el mismo empeño que se daba a su familia.
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Toda la familia de la docente, incluyendo a José Luis, viajaron antes de Navidad hacia Quibdó para disfrutar las fiestas de Fin de Año con sus familiares, a los que dejaron hace algún tiempo para buscar un mejor futuro en Medellín.
“Me despedí muy bien. Yo viajé luego y compartí con ellos. Estuve en Navidad con ellos y fue algo muy bonito. A mí me tocó por cuestiones de trabajo venirme, primero que ellos. Pero siempre, siempre fue muy bonita la relación hasta el momento del suceso”, relató este hombre, quien espera esta misma semana volver a la capital chocoana para darles el último adiós a sus cuatro familiares.
Pero esta tarea ha tenido sus contratiempos porque para entregar el cuerpo de Jeylen Daniel fue necesario hacer una prueba de ADN para la plena identificación. “Es lo único que falta para que nos los podamos llevar”, relató.
Aún no saben dónde está
A la angustia de la familia de José Luis se suma la de otra familia, oriunda de Magdalena Medio antioqueño, quien por una fotografía que vieron a través de las redes sociales identificaron el que sería el carro de uno de sus integrantes.
En la mañana de este domingo, cinco de los miembros de este grupo familiar se acercaron a Medicina Legal para que les dieran alguna respuesta, puesto que en los listados de heridos ni en el primero que se conoció de los fallecidos aparece su nombre.
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“Vinimos acá a buscar porque no tenemos ninguna información y no me puedo comunicar con él. Vimos el carro sepultado, pero no nos han confirmado que se haya muerto ni nada y por ahora guardamos la esperanza de que aparezca con vida”, relató el hombre, quien prefirió mantener la reserva de su identidad y la de su familiar para evitar preocupar más a sus parientes, tanto en Medellín como quienes están en la subregión de la cual son oriundos.
Avanza la identificación
La gobernadora del Chocó, Nubia Carolina Córdoba, señaló que en Medicina Legal, de Medellín avanza la identificación de las víctimas de esta tragedia y que ya van 24 de los 33 cuerpos que están identificados plenamente por los médicos forenses de Medellín.´
“Se adelantan acciones para poder continuar con las operaciones de búsqueda en el terreno y esto va a permitir buscar los cuerpos que hacen falta”, señaló Córdoba.
Además, sobre las 4:00 p.m. de ayer encontraron tres nuevos cuerpos sin vida, dos hombres y una mujer, entre los escombros ocasionados por este deslizamiento que enluta al Chocó, llegando así a 36 las víctimas de este desastre, a la espera de que en los próximos días continúe la recuperación de más cadáveres, que con esto se estima sean siete los desaparecidos.
Todo esto con el trabajo de 57 unidades del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y otros 142 en alistamiento que se encargarán de recorrer el territorio para que puedan acabar con la búsqueda, ojalá, hallando a algún superviviente.
Entre las decisiones adoptadas por la gobernadora Córdoba estará que se busque el ingreso de maquinaria liviana y que se pueda hacer bombeos en la zona para extraer el agua que está filtrada para hacer más ágiles estas labores.
Mientras tanto, las familias mediante fotos van identificado uno a uno los cuerpos de aquellos familiares a quienes esperaban y que entre toneladas de tierra y lodo quedaron sepultados en el camino hacia sus casas o sus trabajos.