García habló con EL COLOMBIANO y asegura que, aunque él cuadró la reunión, no vio los 500 millones de pesos en efectivo.
Mientras el presidente Gustavo Petro se encuentra de gira en Emiratos Árabes, en Colombia la semana inició con otro escándalo que podría tener repercusiones penales. La Revista Cambio reveló cómo, según la versión del director de la Unidad Nacional de Protección, Augusto Rodríguez, en la campaña hubo una reunión en la que Diego Marín, uno de los mayores contrabandistas del país, habría entregado 500 millones de pesos en efectivo como aporte.
Esa reunión sucedió en 2022 en una casa en Guaymaral, cerca a Bogotá, y el encuentro fue organizado por Néstor Daniel García, un reconocido político del Partido Verde que estaba haciendo campaña por Petro en ese momento. García hoy tiene varios contratos en diferentes entidades del Ejecutivo y asegura que él fue el que organizó el encuentro. “Yo lo organicé porque tenía un amigo empresario que me pidió que lo acercara a la campaña. Allí estuvimos en lo que parecía la casa del señor Marín, pero yo no sabía que era Papá Pitufo”, le dijo a este diario.
El propio presidente aceptó que esa reunión existió y que hubo una infiltración de 500 millones de pesos que fue advertida por Rodríguez, pero cuando se dieron cuenta de quién era la persona detrás del efectivo, Petro asegura que dio la orden de regresar el dinero y grabar en video la devolución. El video no se conoce. Lo que no es claro es por qué no se avisó a las autoridades de esa financiación que se presumió ilegal en la propia campaña.
“Yo llegué en mi Kía Picanto con Xavi, vimos un partido de Barcelona, estaba mi amigo, el empresario Víctor Gutiérrez, Marín y yo. También estaba la familia de Marín, pero no sé de quién era la casa. Marín fue el que nos recibió pero yo no sé si la casa estaba rentada, era de ellos, nada. Gutiérrez era un empresario de toda mi confianza”, agrega.
García además asegura que de esa casa él salió con Vendrell “sin ningún maletín con efectivo”.
Vendrell es un político catalán que ha estado involucrado en varios problemas en el Gobierno porque no ha quedado claro cuál es su rol en Presidencia. Fue uno de los personajes claves en los pagos a los testigos electorales en las votaciones de primera y segunda vuelta, lo que consolidó uno de los capítulos de la investigación por financiación ilegal en la campaña por la que el Consejo Nacional Electoral imputó cargos a Ricardo Roa y el propio presidente Petro.
El tema de Pitufo lo hizo público Rodríguez en el Consejo de Ministros de la semana pasada, en una clara acusación directa contra el ahora jefe de Despacho de Petro, Armando Benedetti. El consejo desató una crisis de Gobierno con la orden del mandatario de solicitar todas las renuncias protocolarias a su equipo. Benedetti luego anunció que denunció a Rodríguez por las acusaciones y en la mitad de la historia se conoció que el propio Rodríguez tuvo una reunión en el bar Clandestino en Bogotá con Marín, en donde confirmó la entrega de los 500 millones. De esa reunión entre el actual director de la UNP y el contrabandista en un bar tampoco se conocen mayores detalles.
Vendrell ha tenido la protección de Petro y también estuvo al frente de la organización de activistas digitales en la campaña, que luego se convirtieron en contratistas en varias entidades.
El empresario y político Catalán se ha mantenido en silencio y el presidente espera la extradición de Marín desde Portugal para que venga a Colombia a contarle a la justicia cuál fue su papel en un presunto caso de corrupción en varios gobiernos y en la propia infiltración ilegal de su campaña.
