El crimen del líder social caqueteño Yony Chala Hueje comenzó a superar la muralla de la impunidad y el olvido, tras la captura y encarcelamiento de uno de los disidentes de las Farc que participó en su asesinato.
Se trata de Brainer Millán Marulanda, alias “Chiqui”, miembro del frente Rodrigo Cadete del Estado Mayor Central (EMC), la organización narcoguerrillera que comanda “Iván Mordisco”.
Según la investigación judicial, “el 27 de junio del 2021 ‘Chiqui’ y otros hombres armados, que se movilizaban en motocicletas, llegaron a la vivienda del líder social, ubicada en
la vereda La Esmeralda, en Cartagena del Chairá (Caquetá). Al parecer, le dijeron que la comunidad lo esperaba para una reunión y lo convencieron de salir del inmueble; sin embargo, metros más adelante le dispararon”, indicó la Fiscalía en un comunicado.
Los familiares encontraron el cuerpo agonizante de la víctima en una zanja, en inmediaciones de la vereda Villa Colombia, y a pesar de que lo llevaron a un centro médico, falleció.
Yony Chala era fiscal de la Junta de Acción Comunal de la vereda Comuneros, en Cartagena del Chairá, y de acuerdo con las pesquisas policiales fue ejecutado porque no aceptó los mandatos del EMC, interesado en controlar a la población civil en la zona.
Tres años después del crimen, en un operativo conjunto de la Dijín de la Policía, el CTI de la Fiscalía y el Ejército, “Chiqui” fue capturado en el parque Santander, en el centro de la ciudad de Florencia (Caquetá).
El dosier criminal indica que ingresó al EMC en 2019, impulsado por su hermano Dimar Millán Marulanda (“Gordo César”), cabecilla de finanzas del frente Rodrigo Cadete. Sus primeros trabajos para la insurgencia fueron extorsiones y homicidios en los municipios de Doncello, Paujil y Cartagena del Chairá, presuntamente.
Por la muerte de Yony Chala fue incluido en el cartel de los más buscados por atacar a líderes sociales, según el coronel Edwin Urrego, director de la Dijín.
En la audiencia de control de garantías, la Fiscalía le imputó cargos por homicidio agravado, concierto para delinquir agravado y porte ilegal de armas. Se declaró inocente, pero fue enviado a la cárcel como medida de aseguramiento.
En abril de 2023 también había sido judicializado Yoner Cortés Artunduaga (“Guama”), otro disidente, quien participó en el crimen. Fue enviado a prisión igualmente.
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