Ocho años duró la relación entre el subintendente Augusto Mieles y Adriana Silva Prada. Producto del “gran amor” que siempre le juró el uniformado, según se puede ver en su cuenta de Facebook, nació un niño que ahora tiene nueve años.
Pero desde hace dos meses, según fuentes cercanas al caso, ella empezó a sostener una relación sentimental con Fabián Alberto Fuentes Flóres, alias “Cenizo” o “Rusio”. Esta relación fue la que hizo que entre los dos, de acuerdo con las autoridades, planearan asesinar al uniformado.
Por eso, decidieron contactar a Darío Rojas Sánchez, alias “el Primo”, desmovilizado de las autodefensas. Él fue el que se encargó de realizar todos los contactos y conseguir a los dos sicarios que acabaron con la vida del subintendente.
Cristian Ávila Serrano y Camilo Esteban Montero Yate, desmovilizado de las Farc desde 2011, fueron contratados y recibieron dos millones 300 mil pesos para llevar a cabo el homicidio.
Por esta razón, el 22 de julio cuando Mieles se dirigía desde el municipio de Sibaté, donde realizaba un curso, hasta Soacha, fue interceptado por Cristian. A pocas cuadras, se encontraba Camilo Esteban, quien esperaba a su compañero para huir.
Pero el plan no salió como ellos lo esperaban. Después de disparar contra Mieles, el sicario empezó a correr, pero fue interceptado por el intendente Leonardo Carvajal Mesa, quien en un cruce de disparos quedó herido y falleció minutos después en el hospital Mario Gaitán Yanguas, de Soacha.
Después del hecho, Cristian fue capturado y se convirtió en pieza clave de la investigación para determinar quiénes habían sido los autores materiales del asesinato. Este hombre tiene antecedentes por extorsión y lesiones personales.
Dos semanas transcurrieron hasta que los investigadores de la Policía de Cundinamarca lograron armar todo el rompecabezas y capturar a las personas. Adriana Silva Prada, fue detenida la mañana de este jueves en la carrera 68 con avenida Américas, en el oriente de la capital.
Los otros tres hombres fueron detenidos en diferentes partes de la ciudad. Alias “el Primo”, el intermediario, tiene antecedentes judiciales por los delitos de homicidio, lesiones personales e incesto. Alias “Cenizo”, aunque no posee antecedentes, hay indicios de que engañaba a las personas en el departamento del Cauca, donde se identificaba como Ricardo García García.
Los cinco detenidos tendrán que responder por los delitos de homicidio agravado y tráfico, porte y tenencia de armas de fuego.
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