La abogada de la Secretaría de Gobierno de Bogotá renunció este fin de semana luego de culpar a Rosa Elvira Cely de su propia muerte, ocurrida el 23 de mayo de 2012, por no haber evitado salir con sus compañeros de estudio Javier Velasco y Mauricio Ariza (ahora exculpado del crimen), pero quienes eran tildados de malos en esa época.
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Se trata de Nayive Carrasco, la jefe jurídica de dicho despacho, quien dimitió e hizo que el secretario de Gobierno, Miguel Uribe, junto a la secretaria de la Mujer, Cristina Vélez, y la secretaria general de Bogotá, Dalia Hernández, quienes salieron este fin de semana a pedir disculpas públicas frente al señalamiento contra la propia Cely.
Carrasco había asumido el cargo el pasado 5 de enero y tras haber recibido una denuncia de los familiares de la fallecida el pasado 11 de abril, quienes argumentaron que las autoridades no habían actuado con celeridad y eficacia tras reporte a la línea 123, la funcionaria salió y emitió el desafortunado concepto.
Rosa Elvira Cely era madre soltera y vendía dulces frente a la entrada del Hospital Militar de Bogotá. A sus 35 años validaba su bachillerato y aspiraba ser psicóloga pero el trágico desenlace resulta que fue culpa de ella, según Carrasco.
El propio alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, señaló en un su cuenta de Twitter que no comparte el concepto jurídico expedido por la Secretaría de Gobierno. “Acabo de pedir revisar y rectificar la posición del Distrito en el caso de Rosa Elvira Cely”, agregó Peñalosa.
Esta situación hizo que la Alcaldía de Bogotá evalúe conciliar con los familiares de Cely, la salida en falso de la jefe jurídica.
