El líder máximo de las Farc, Rodrigo Londoño, alias “Timochenko”, declarará este domingo desde La Habana el cese el fuego definitivo, además de convocar la X Conferencia de la guerrilla entre los días 13 y 19 de septiembre, confirmó un portavoz de la insurgencia.
El anuncio, que implica el fin de la actividad ofensiva militar de las Farc, tendrá lugar este domingo, a las 4:00 de la tarde, desde el Hotel Nacional de la capital cubana, una comparecencia sin preguntas del líder máximo de la guerrilla.
Además, se convocará la X Conferencia de la guerrilla entre el 13 y el 19 de septiembre, en la que sus filas tendrán que dar el visto bueno a los compromisos de paz y aprobar el abandono de las armas para pasar a la vida civil y transformar el grupo en un movimiento político.
Según un comunicado difundido este sábado por las Farc, la reunión será en los Llanos del Yari, municipio de San Vicente del Caguán y en ella participarán cerca de 200 delegados, de ellos 29 integrantes del Estado Mayor Central de la guerrilla y otros representantes de distintas estructuras “elegidos democráticamente”.
Asistirán también a la Conferencia 50 invitados internacionales y nacionales, especifica el texto, fechado en La Habana y que además concreta detalles sobre la cobertura de prensa del suceso.
“La importancia histórica de este evento amerita que los pueblos de Colombia y el mundo conozcan de primera mano el desarrollo y las determinaciones de la que será la última conferencia de nuestra organización en armas; que refrendará los acuerdos de paz y dará paso a la transformación de las Farc en un movimiento político legal”, señala la insurgencia. .
El cese el fuego definitivo declarado por Farc entraría en vigor a las 00.00 horas del lunes 29 de agosto, en el mismo momento que el alto el fuego del Ejército que el presidente Juan Manuel Santos declaró hace unos días, lo que supone de facto el fin de la guerra.
Desde las cero horas del próximo lunes, las Fuerzas Militares suspenderán la “acción ofensiva”, pero no la “persecución al delito”, aseguró el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas.
Con esa histórica decisión “se termina el conflicto armado con las Farc, porque ese cese al fuego y de hostilidades es bilateral y definitivo”, agregó Villegas.
Villegas se refirió al operativo que las Fuerzas Armadas pondrán en marcha para garantizar la seguridad de los guerrilleros que se desplacen a las áreas de reunión para su proceso de desarme, desmovilización y reintegración, bajo supervisión internacional encabezada por la ONU, en un plazo de 180 días a partir de la firma protocolaria de la paz.
El miércoles pasado en La Habana, las delegaciones del Gobierno y la guerrilla rubricaron el documento para, según Villegas, darle “existencia jurídica” a lo pactado y someterlo a votación popular mediante un plebiscito que el presidente Santos fijó para el 2 de octubre y que deberá ser convocado por el Congreso.
Villegas señaló además que alrededor de 16.500 soldados y policías se encargarán de la seguridad durante el desplazamiento de los miembros de las Farc a las áreas de reunión para su desmovilización definitiva.
“El dispositivo general de la fuerza pública va a ser de unos 16.500 hombres entre soldados y policías que estarán listos a atender la seguridad del desplazamiento de las Farc hacia las zonas veredales de tránsito”, sostuvo.
Como parte de las negociaciones de paz de casi cuatro años en La Habana, que concluyeron el pasado martes, el Gobierno y las Farc acordaron que los guerrilleros se concentrarán en Zonas Veredales Transitorias de Normalización (ZVTN) y en campamentos como paso previo a la dejación de armas y la desmovilización.
De igual forma, el ministro anunció que tras “31 operaciones de reconocimiento en el terreno” por parte de las Naciones Unidas, la fuerza pública y una delegación de las Farc, se acordó reducir a 22 las zonas veredales y a seis los campamentos, para un total de 28 lugares. En principio se había hablado de 23 zonas veredales y ocho campamentos.
Este viernes Santos defendió de las críticas el acuerdo alcanzado con las Farc al manifestar que no hubo “concesiones por debajo de la mesa” y que la negociación fue “responsable” y “seria”.