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Antioquia inició la etapa de preparación ante la llegada de la segunda temporada de lluvias que azotará la región entre los meses de septiembre, octubre y noviembre. Así lo confirmó este jueves Jaime Enrique Gómez Zapata, director general del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia (Dagran), durante la reunión del Consejo Departamental de Manejo de Desastres.
“Iniciamos la fase de preparación para esta temporada, donde socializamos la Estrategia Departamental de Respuesta a Emergencias, así como el marco de actuación de cada uno de los municipios y de los actores del Consejo para esta temporada de precipitaciones”, explicó Gómez.
En la reunión se acordó planificar el marco de actuación que cada entidad debe tener ante una emergencia, así como la definición de sus roles. También se pactó crear un inventario de recursos municipales, departamentales y de las demás entidades ligadas al Sistema Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, con el fin de hacer un esquema general de los medios con los que se cuenta para hacer frente a las emergencias ocasionadas por las tempestades.
En la reunión estuvo presente Yolanda González Hernández, directora general del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), entidad que trabaja en articulación con el Consejo Departamental de Manejo de Desastres, a través del Sistema de Alertas y Monitoreo de Antioquia (SAMA) y del Centro Regional de Pronósticos de Antioquia. Estos dos últimos suministran información hidrometerelógica, alertas por inundaciones, crecientes súbitas e, incluso, movimientos en masa asociados a saturación por precipitaciones del terreno.
“Estas herramientas se conjugan para estar preparados y tener una buena respuesta en la temporada de lluvias que se avecina”, dijo el director Gómez.
En el encuentro, la directora González hizo un balance de los antecedentes de las tormentas y el estado de alertas para el departamento. Además, indicó –según las predicciones del Ideam– que Antioquia tendrá precipitaciones por encima de lo normal, inclusive, más fuertes que las registradas en la segunda temporada del año pasado.
Según González, en junio de 2021 –pese a ser un mes donde regularmente disminuyen los aguaceros– se presentaron lluvias por encima de lo normal, hecho que sucedió especialmente en los municipios de San Juan de Urabá, La Unión, San Roque, Cáceres, y Concepción, en donde en un día llovió lo que en promedio llueve en un mes.
Según la líder del Ideam, Antioquia tiene gran diversidad climática. Por ejemplo, hay regiones que tienen dos periodos de más lluvias y otros que presentan menos. Incluso hay regiones como Urabá o el Occidente (influenciadas por otros sistemas atmosféricos) que presentan precipitaciones gran parte del año.
Desde el Dagran se hizo un llamado a la comunidad a estar alerta, pues este año no han disminuido las precipitaciones y, por eso, los suelos están saturados de agua, lo que incrementa la probabilidad de movimientos en masa.
Por este mismo fenómeno los ríos y quebradas no han disminuido sus niveles, con las lluvias esperadas podrían presentarse crecientes súbitas o avenidas torrenciales. Octubre es el mes en el que más se presentan tormentas eléctricas, por lo tanto, la comunidad no debe exponerse a campos abiertos.
De acuerdo con Luis Fernando Suárez, gobernador (e) de Antioquia, por la ola invernal hay 31 municipios del departamento que han declarado la calamidad pública y 600 puntos de las vías que atraviesan la región deben ser intervenidos por las afectaciones derivadas de las intensas lluvias.
El caso de Medellín
La capital antioqueña también está preparada para esta temporada. El Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres (Dagrd) y el Cuerpo Oficial de Bomberos Medellín hacen seguimiento a las afectaciones causadas por las precipitaciones que han ocurrido en los últimos días en la ciudad en la temporada de menos lluvias.
“Durante 2021, con nuestro Cuerpo Oficial de Bomberos Medellín y el equipo técnico del Dagrd hemos atendido 1.100 emergencias derivadas de las lluvias. La ocurrencia del fenómeno de La Niña y el paso de ondas tropicales han generado fuertes precipitaciones con afectaciones en la ciudad. El llamado es a que las comunidades se preparen, atiendan las recomendaciones de los organismos en manejo de desastres y que siempre reporten en la línea 123 cualquier situación que ponga en riesgo la vida”, dijo Alethia Arnago, directora del Dagrd.
Del total de casos atendidos, al menos 720 corresponden a desplomes de árboles, 273 a deslizamientos y 98 a inundaciones. Por estas causas, las autoridades también han desarrollado 2.290 inspecciones por riesgo, entre el primero de enero y el 31 de agosto de este año, que han derivado en 483 evacuaciones definitivas y 480 temporales.