La exgerente de la ESE Hospital San Fernando de Amagá, Claudia Patricia Marín Alzate, fue sancionada por la Procuraduría General de la Nación con una suspensión e inhabilidad especial de ocho meses por el uso indebido de la ambulancia del centro médico.
La medida también cobijó al conductor de la entidad, Rafael Antonio Arango Castaño, pero con una sanción solo de un mes.
La Procuraduría, en este caso la Provincial de Amagá (Suroeste de Antioquia) comprobó que la gerente y el conductor de la ESE, el 4 de marzo del 2020, utilizaron de forma indebida la ambulancia asignada al centro hospitalario para transportar a la ejecutiva del hospital a la Seccional de Salud de Antioquia.
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Según el ente de control, se pudo corroborar que “el vehículo se vio involucrado en un accidente de tránsito en el que salió afectado un motociclista, y en el momento del incidente tenía las sirenas encendidas, conducta con la que Arango Castaño violó los protocolos, pese a que no iban en misión médica sino transportando a la ejecutiva para llevar una documentación”.
La conducta de ambos funcionarios fue calificada como grave, a título de dolo, porque ellos, “de manera consciente decidieron hacer uso de la ambulancia, conociendo las restricciones de ese vehículo para ser utilizado en la forma en que se hizo, y pese a ello tuvieron la voluntad de hacerlo”.
La Procuraduría explicó que, teniendo en cuenta que la disciplinada no se encuentra ejerciendo el cargo, “la sanción se convertirá en salarios de acuerdo con el monto devengado al momento de la comisión de la falta”.
Precisó, también, que las apoderadas de la exgerente y el conductor ya interpusieron el recurso de apelación, proceso cuya sustentación se realizará el próximo jueves 4 de septiembre.
