A raíz de la destitución del exalcalde Ferney Darío Fernández por parte del Consejo de Estado, el municipio de Venecia celebrará sus elecciones atípicas el próximo 29 de diciembre. Las dos candidatas de este nuevo certamen electoral son Natalia Orozco Loaiza e Ismary Bermúdez Vanegas.
Esta nueva elección por uno de los municipios del Suroeste más cotizados por los políticos ha reflejado las pujas y alianzas entre gamonales de diversas colectividades que han brindado su apoyo a una u otra candidata, y que sirven de termómetro inicial para las elecciones de 2026.
La primera de ellas es la exconcejal Natalia Orozco Loaiza, una tecnóloga en Seguridad Industrial y Salud Ocupacional así como profesional en Administración de Salud Ocupacional, que tras laborar 13 años en una empresa del Suroeste, decidió incursionar en la política de la mano de su jefe político, el exalcalde Fernández. De la mano de este resultó elegida concejal para el periodo 2024-2027. Sin embargo, tras la intempestiva salida de Fernández, ella renunció a su curul para aspirar a la Alcaldía.
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En las declaraciones que ha dado a los medios regionales, como el periódico El Suroeste, Orozco ha comentado que tiene experiencia en lo político y social toda vez que, entre otras actividades, fue presidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda El Recreo.
Sobre su designación por parte de Fernández, para continuar con su bandera, ella comentó que esta fue una decisión tomada en conjunto con los demás precandidatos y el destituido exalcalde.
Orozco comentó que su propuesta para los venecianos es continuar el Plan de Desarrollo de Fernández, toda vez que su propio Plan toma un 95% del anterior y solo cambia un 5% restante que tocará los temas relacionados con la avenida torrencial que sufrió el municipio el pasado mes de junio.
La coalición de Orozco, denominada Venecia Nos Une, es apoyada por varias colectividades encabezadas por el Partido Liberal y el Partido Conservador por medio de los congresistas John Jairo Roldán y Germán Blanco, “antagonistas” en el capitolio, pues mientras uno se declara abiertamente antipetrista, el otro ha destacado por su cercanía a las propuestas del presidente Petro. La coalición la cierran Cambio Radical y el Nuevo Liberalismo.
De otro lado, la segunda candidatura la encabeza la también exconcejal Ismary Bermúdez Vanegas. Como han reseñado los medios locales, ella es una tecnóloga en Producción Agropecuaria oriunda de la vereda El Rincón la cual trabajó 32 años en la banca privada antes de meterse en la política en 2019.
De Bermúdez se destaca que en 2019 obtuvo 458 votos, lo que la dejó como la concejal mujer más votada en la historia de Venecia. Volvió a repetir curul en 2023, pero ante la salida de Fernández decidió convertirse en la designada por la oposición para ocupar la vacante.
Como promesas de campaña, Bermúdez ha indicado en las entrevistas dadas que su principal enfoque será atender las casi 80 familias que quedaron damnificadas por la avenida torrencial.
También propone la construcción de una nueva planta de agua para el casco urbano que atenderá la creciente población de esta parte del municipio.
Así mismo, dice que incentivará el turismo y potenciará las fortalezas en este campo como el pesebre mundialmente famoso y el nuevo parque de Comfama. Igual hará con la economía del municipio a través de los mercados campesinos.
Sobre salud, dijo que buscará fortalecer el hospital local, mientras que en educación le apostará a la oferta educativa extraescolar para niños y jóvenes del municipio por medio de la casa de la Cultura.
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Bermúdez es apoyada en su aspiración por los Partidos Cambio Radical y Centro Democrático, el cual en la pasada administración detentó el poder. Frente a este último, su principal motor es el grupo denominado Los Paolos a la cabeza de los congresistas Paola Holguín y Juan Espinal. Junto a ellos también se ha visto en Venecia al exalcalde de La Estrella Juan Sebastián Abad, quien en el pasado tuvo relación directa con el “petrista” Julián Bedoya.
Pese a sus diferencias políticas, las dos aspirantes le han pedido a sus simpatizantes que eviten las confrontaciones políticas que deriven en riñas u otras situaciones que lamentar a raíz de la polarización y la intolerancia.
En un pacto por la no violencia y la sororidad, las contendientes se comprometieron a evitar la violencia política y propender por entregar información veraz en sus campañas así como evitar caer en la coacción o la corrupción electoral, toda vez que más allá de lo político la contienda electoral será una ocasión histórica en Venecia.