Incluso al interior de sus hogares, los niños pueden estar desprotegidos y en peligro. Porque, aunque la familia debería ser el primer núcleo protector, en el 92% de los casos denunciados de abuso sexual infantil en Medellín el victimario es pariente del menor de edad.
Así lo explicó Margarita María Gómez, primera dama de Medellín, durante la firma de la Gran alianza para prevenir el abuso sexual infantil, un pacto suscrito ayer entre los diez municipios que conforman el Área Metropolitana y que tiene como fin integrar esfuerzos en la prevención de esta problemática.
Gómez indicó que este proyecto comenzó hace tres meses, a partir de la necesidad que tenía Medellín de contar con el compromiso del resto de administraciones ante un problema que es generalizado.
“Medellín hoy atiende casos de otros municipios, necesitamos ese respaldo”, contó la primera dama.
Una de las primeras tareas que asumirán las localidades será la consolidación de un sistema de información que permita unificar las denuncias de abuso sexual infantil que actualmente se reciben a través de diferentes dependencias, como la Fiscalía, las unidades hospitalarias, la Policía o las comisarías de familia.
Mejorar los procesos de acompañamiento para los menores de edad, víctimas de abuso, es el segundo punto clave que abordarán los diez municipios.
“Siempre se piensa en el victimario, ¿y qué pasa con los niños? Hay que fortalecer el proceso de atención psicológica. Los retos son inmensos”, dijo Gómez.
Eugenio Prieto, director del Área Metropolitana, expresó que en este esfuerzo por concertar decisiones articuladas ya se firmó un convenio con la Universidad de Antioquia para la creación de este sistema de información. Además, se instalarán dos mesas técnicas (en el Aburrá norte y en el Aburrá sur), lideradas por las autoridades de cada zona.