La investigación científica antioqueña perdió, el pasado 03 de febrero, a dos de sus principales promotores, la microbióloga Ángela Restrepo Moreno y el médico patólogo Emilio Bojanini Nize. Restrepo y Bojanini fueron respetadas figuras de la ciencia y la medicina del país, que contribuyeron a la fundación de la Corporación de Investigaciones Biológicas (CIB), el 10 de febrero de 1970.
La CIB es un importante centro de investigación científica que ha contribuido a la profesionalización de la salud en el país. En sus más de 50 años de historia, ha gestado importantes iniciativas, especialmente en la investigación en salud y en agrobiotecnología.
En 2006 obtuvo su primera patente en alianza con la Universidad de Antioquia y la Universidad Nacional. Asimismo, destacados investigadores han pasado por sus laboratorios, como Sir Richard Roberts, Premio Nobel de Medicina y Fisiología de 1993. Además, en su fondo editorial se han publicado aproximadamente 120 libros con circulación nacional e internacional.
La idea de crear una institución dedicada a la investigación surgió en 1968, cuando Ángela Restrepo Moreno, Emilio Bojanini Nize y William Rojas Montoya, este último médico internista e inmunólogo, se unieron, junto con otros profesores de la Universidad de Antioquia, para darle vida a la Corporación.
En el libro “La CIB, un lugar para el conocimiento 1970-2010” se registra que Restrepo, Bojanini, Rojas y los demás profesores decidieron “fundar una institución que les permitiera presentar propuestas de investigación a entidades nacionales e internacionales para obtener recursos y (...) manejarlos eficientemente”, en un momento en el que las universidades del país aún no concebían la investigación académica como una prioridad.
En un artículo para la Corporación de Fomento Civíco y Cultural, Jairo Andrés Campuzano Hoyos afirmó que los investigadores de la CIB publicaron inclusive más artículos en revistas científicas que la Universidad de Antioquia y la Universidad Nacional.
Tiempo después se separarían de la universidad por diferencias administrativas y tendrían una sede temporal en el Hospital Pablo Tobón Uribe, antes de establecer la suya propia en un predio de Robledo.
“Este importante trío se dedica a adelantar investigaciones en diversos campos de la ciencia y la salud”, reseñó EL COLOMBIANO el 27 de septiembre de 1994, dos días antes de que en nombre de la corporación el gerente Emilio Bojanini recibiera por tercera vez el premio Germán Saldarriaga del Valle de la Corporación de Fomento Cívico y Cultural de Medellín.
Reconocimiento que en 1986 fue otorgado a título personal a William Rojas Montoya y en 1990 a Ángela Restrepo Moreno en nombre de la corporación.
Emilio Bojanini se desempeñó como gerente de 1973 a 1996. De acuerdo con la CIB, su dirección “impulsó el desarrollo científico y la formación de profesionales con un claro perfil investigativo”.
Restrepo y Bojanini “hicieron parte de un grupo de profesores que llegan a mitad del siglo pasado muy formados en sus áreas específicas”, recordó Carlos Palacio Acosta, decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia.