El nuevo comandante de la Policía Metropolitana, el general William Castaño, comenzó a tomar decisiones sobre la nueva estrategia de seguridad que implementarán los uniformados a su cargo para buscar contrarrestar los delitos de alto impacto en los diez municipios del Valle de Aburrá.
La Meval lanzó la estrategia denominada Caravanas por la Seguridad, que estará orientada a realizar actividades institucionales basadas en la prevención, disuasión y control en los territorios. Esta estrategia consiste en caravanas integradas por 14 vehículos y 14 motocicletas policiales los cuales se desplazan por lugares estratégicos del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, con la oferta institucional interviniendo por medio de la realización de registro a personas, vehículos y motocicletas, actividades judiciales y de inteligencia.
Estas caravanas estarán conformadas por uniformados con diferentes especialidades del servicio de policía, como integrantes del Gaula, Policía de Infancia y Adolescencia, Policía comunitaria, Seccional de Investigación Criminal, Carabineros, Inteligencia Policial, entre otros.
La finalidad de esta estrategia, según lo explicó el propio director de la Policía, William Salamanca, es fomentar la percepción de seguridad en los habitantes de los 10 municipios que integran el Área Metropolitana del Valle de Aburrá. También tiene como objetivo garantizar la seguridad y convivencia desplegando esta serie de acciones institucionales que, según estima la Policía, permiten contener la materialización de conductas delincuenciales que afectan la tranquilidad.
Esta estrategia se articulará con los planes y operaciones que se desarrollan en El Área Metropolitana para combatir a los grupos delincuenciales. En síntesis, busca que la acción de inteligencia y policiva esté acompañada con un dispositivo enfocado al nuevo modelo del servicio de Policía orientado a las personas y los territorios.
Esta medida se suma al anuncio que realizó el ministro de Defensa, Iván Velásquez, quien la semana pasada confirmó la creación de una sede de Interpol en Medellín, que para diciembre ya estará operando. Con esta nueva sede se busca fortalecer la capacidad para combatir y desmantelar estructuras criminales en todo el departamento y en especial las dedicadas a delitos como explotación sexual. “Medellín merece una atención muy especial desde esa especialidad y esa competencia de la Policía”, consideró el ministro Velásquez, quien también anunció que la región tendrá 300 nuevos agentes de policía judicial, para aumentar la capacidad investigativa y de inteligencia en contra del Clan del Golfo, el ELN, las disidencias y los grupos delincuenciales, que desde el Valle de Aburrá se han lanzado a intentar conquistar las rentas criminales en otras subregiones.
Las nuevas estrategias de seguridad anunciadas en los últimos días, confirman la decisión de la cúpula de las Fuerzas Armadas y el Gobierno Nacional de tener en el Valle de Aburrá a un hombre de mayor confianza para que tome las riendas de la policía y la lucha contra el crimen en un territorio que desde el gobierno Petro consideran estratégico. Cabe recordar que el general Castaño reemplazó a su par Óscar Andrés Lamprea Pinzón como comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá (Meval), quien salió del cargo hace ya casi un mes y se convirtió en el cuarto que deja el máximo cargo en este comando policial antes de cumplir el primer año.
El nuevo comandante de la Meval es oriundo del Tolima y tiene en su hoja de vida 91 condecoraciones y 281 felicitaciones, es profesional en administración policial y en administración de empresas; especialista en control interno, gestión ambiental, derechos humanos y Derecho Internacional Humanitario; y maestrante en gestión ambiental y energética en las organizaciones.
