Un taxista que prestaba su servicio en Medellín y el área metropolitana habría utilizado sustancias químicas para doblegar a los pasajeros y así poderles hurtar sus pertenencias. Entre sus víctimas estarían seis mujeres y un adulto mayor de 72 años.
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Tras una larga investigación adelantada por un fiscal de la Estructura de Apoyo (EDA) de la Fiscalía, entre enero y septiembre de este año, servidores del Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, dieron con la captura del sospechoso, identificado como Jorge Mauricio Valencia Agudelo, de 38 años, mientras se movilizaba con su vehículo por el centro de Medellín.
El chofer es señalado de robar a, por lo menos, ocho pasajeros (seis mujeres y dos hombres, uno de estos de 72 años). Las acciones ilegales, de acuerdo con la Fiscalía, se habrían cometido en horas de la noche, especialmente durante los fines de semana y en reconocidas zonas de entretenimiento de Medellín y Envigado. Los hechos ocurrieron entre el 15 de enero y el 4 de septiembre de 2022.
Según la investigación, Valencia Agudelo recogía a sus víctimas y les suministraba sustancias químicas, luego les hurtaba sus pertenencias, especialmente tarjetas de crédito. Una vez cometido el hurto, las abandonaba en diferentes puntos del Valle de Aburrá.
Con el producto de lo hurtado, el taxista de 38 años habría realizado compras por al menos $50 millones, $20 de los cuales se cree que fueron cancelados con las tarjetas de las víctimas. Las adquisiciones estarían representadas en objetos personales.
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Ante un juez de control de garantías de Medellín, la Fiscalía le imputó los delitos de hurto calificado y agravado, y hurto por medios informáticos. El taxista negó los cargos y recibió medida de aseguramiento privativa de la libertad en centro carcelario.
La Fiscalía investiga si Valencia Agudelo ha incurrido en otras conductas delictivas similares.