Lo que inició como una conversación en Reddit, el 22 de enero, se convirtió en la Marcha por la Ciencia que congregará este sábado a miles de científicos en más de 500 ciudades del mundo, incluida Medellín.
Resulta extraño. Primera vez que se unen los científicos para marchar. Para llamar la atención sobre su importancia para el progreso y el bienestar humano.
Pretende, de acuerdo con la declaración de los científicos, “una ciencia bien financiada y comunicada públicamente como un pilar de la libertad humana y la prosperidad. Nos unimos como un grupo diverso, no partidista para pedir una ciencia que abrace el bien común y para que los líderes políticos y legisladores promulguen políticas basadas en evidencias, por el interés público”.
Juan Fernando Gómez, líder de la actividad en Medellín, explicó que se trata de “estimular un hábito de hacer ciencia imparcial y generar una legislación que la apoye, la estimule y proteja su publicación y divulgación fiel, por encima de intereses particulares no científicos”.
Para el investigador “esto no solo nos ayudará a tener un conocimiento válido disponible a la hora de construir nuestra realidad y resolver nuestros problemas, sino que también preparará a nuestra gente a tener el nivel y la disciplina para respetar los hechos, los datos y generar conocimiento científico que pueda servir a la humanidad”.
Laura Guertin, profesora de Ciencias de la Tierra en la Universidad del estado de Pensilvania, Estados Unidos, explicó en su blog que “es el primer paso por un movimiento global para defender el rol vital de la ciencia en nuestra salud, seguridad, economías y gobiernos”.
Y aunque se cumple en el Día de la Tierra, va más allá de las ciencias ambientales, comprende todas las disciplinas.
Para los organizadores iniciales en Estados Unidos, se trata de una lucha por la financiación adecuada y por una mayor influencia política. También para crear conciencia acerca del tipo de investigaciones que se realizan.
Si bien en el país del norte los recortes en ciencia propuestos por el presidente Donald Trump afectan sectores como el medio ambiente, el cambio climático y la salud, en otras partes del mundo también se reduce el aporte a la investigación científica.
Colombia, pese a anuncios de distintos gobiernos, ha tenido un decrecimiento en términos reales del presupuesto asignado, que hoy apenas alcanza 0.3 % del PIB.
Será además la ocasión para poner en el debate otros temas relacionados con la ciencia. En la declaración oficial, se dice que “no podemos ignorar temas de racismo, sexismo, homofobia, discriminación a discapacitados, xenofobia y otras formas de discriminación en la discusión e implementación de la ciencia”.
Tampoco, agregan, “podemos ignorar las formas en las cuales la ciencia ha sido mal utilizada para afectar comunidades marginadas”.
Por eso esperan que sea una oportunidad para avanzar en diálogos importantes dentro de la comunidad científica y con el público sobre cómo involucrarse en políticas públicas y la actividad política.