Si bien el precio de la carne de res ha subido un 16,58% en lo que va del año, recientemente el Dane informó que este alimento está teniendo una menor presión inflacionaria. Sin embargo, esto no se ha evidenciado en los bolsillos de los colombianos.
Y es que, de acuerdo con el gremio de los ganaderos, Fedegán, mientras el precio para los productores está bajando, el precio para los consumidores sigue por las nubes.
Por tal razón, el gremio considera que se estaría presentando una especulación en el mercado, por lo que solicitaron a la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) y las alcaldías investigar esta “evolución atípica de los precios al consumidor”.
“Al productor se le bajó el precio del ganado en un 18% aproximadamente y, esa reducción no se refleja en el precio final. El diferencial se lo están ganando indebidamente algunos actores de la cadena cárnica que no responden a la baja del precio al ganadero”, expresó Óscar Daza, líder del gremio ganadero.
En este sentido, Hernán Araújo Castro, gerente del Fondo Ganadero del Cesar, expresó que “en el primer eslabón, el precio de compra a los productores es variable y obedece al comportamiento del mercado, esa es la lógica. Extrañamente, cuando el precio de compra al productor baja, esta circunstancia no se refleja en el comportamiento del precio al consumidor, el cual se estabiliza a los ojos de todo el país y, algo aún peor, refleja inexplicablemente una tendencia permanente al alza, con una oferta en crecimiento por el aumento del inventario ganadero”.
Así, Fedegán anotó que los ganaderos no deben cargar el peso de la reducción de precios del ganado, “porque mientras se disminuye su poder adquisitivo, su ingreso y su utilidad, el precio de la carne de res continúa en tendencia ininterrumpidamente ascendente”.
José Felix Lafaurie, presidente del gremio, puntualizó que este aumento en el precio de la carne puede ser producto de que es un mercado intermediado por terceros, que terminan quedándose con un valor mayor al que les corresponde.