Medellín se está consolidando como una ciudad cada vez más relevante para el sector inmobiliario, caracterizada por un dinamismo sostenido y una importante valorización de la vivienda. Los datos más recientes de la firma Tinsa indican que el valor promedio del metro cuadrado en la ciudad ha alcanzado los $4’566.000, reflejando un incremento anual del 10,3%. Esto refleja una de las valorizaciones más altas entre las principales ciudades del país.
Así se lo aseguró Julián Dos Santos, gerente de Desarrollo Negocios de Gómez Platero en Colombia quien, en diálogo con EL COLOMBIANO, explicó que este aumento en los precios obedece, en parte, a la alta demanda de vivienda nueva, la creciente oferta de proyectos sostenibles y la calidad de vida que atrae a nuevos residentes e inversionistas.
Para verlo en contexto, en Bogotá, el precio subió 5,7% en el último año, si bien mantiene el metro cuadrado más costoso ($5’028.000); Cali, por su parte, registra un valor promedio de $2’906.000, mientras en Barranquilla se observa un monto de $3’158.000 —Ver infografía—. Solo Ibagué, que tuvo una variación de 10,4%; y Cúcuta con 13,7%, tuvieron una mayor carestía frente a la ciudad paisa.
¿Qué está pasando en Medellín
Según el experto de Gómez Platero, la capital de Antioquia se ha convertido en un destino atractivo para la inversión inmobiliaria, especialmente para aquellos que buscan capitalizar en el mercado de rentas cortas y alojamientos flexibles. Eso porque ese modelo de alquilar propiedades por períodos breves, generalmente menos de 30 días, es popular entre viajeros, turistas y personas que requieren un alojamiento temporal.
Señaló cómo inversionistas de escala media, con capitales entre 600 y 800 millones de pesos, encuentran en los activos inmobiliarios una opción atractiva ante la baja rentabilidad de otros instrumentos financieros.
En la ciudad, la vivienda nueva se percibe no solo como un lugar para habitar, sino también como un vehículo de inversión que ofrece garantías y retornos estables en el contexto económico y turístico actual de la ciudad. Además del segmento residencial, otros tipos de proyectos inmobiliarios, como los que combinan comercio y oficinas, también muestran un panorama estable en Medellín.
Citando datos de Galería Inmobiliaria, Dos Santos indicó que el mercado en la capital antioqueña muestra una creciente demanda por viviendas de estrato medio, especialmente en las ubicadas en zonas con alta valorización y potencial para las rentas cortas.
Se compra más vivienda nueva
En marzo pasado, el mercado de la vivienda en Antioquia tuvo una dinámica que no se observaba desde octubre de 2022, y fue que los constructores lograran vender más de 2.000 unidades. Así lo reflejan las más recientes cifras de Camacol y Coordenada Urbana, según las cuales, en el tercer mes de este año se comercializaron 2.067 viviendas en el departamento, y de ese número más de la mitad correspondió al segmento No VIS (1.144).
Eso significó que debieron pasar más de dos años para que el sector volviera a romper el techo de las 2.000 unidades vendidas en un mes, aunque lejos del récord de 3.574 visto en marzo de 2015.
Estas cifras provocaron que en el primer trimestre del año crecieran en 9,5% las ventas de vivienda en Antioquia, variación que difiere con el desempeño de ese mercado a nivel nacional, que retrocedió 4,5%.
Al respecto, el experto de Gómez Platerio insistió en que, más allá de la baja en tasas de interés, esto se debe a que los paisas han vuelto a ver la vivienda como un vehículo de inversión.