El año pasado él también había sido elegido, pero renunció tres meses después. Desde noviembre del año anterior hace parte del órgano directivo de Grupo Sura.
Con el regreso de Gabriel Gilinski a la junta directiva del Grupo Nutresa, son dos los conglomerados del llamado Sindicato Antioqueño en los que hace presencia el hijo del banquero Jaime Gilinski, quien tiene participaciones accionarias relevantes (mayores al 30%) tanto en Sura como en Nutresa.
La elección de Gabriel se dio ayer en la asamblea extraordinaria del grupo de alimentos, en la que fueron sometidas a votación tres listas: una de Micro Inversiones, otra de Sura y la de Nugil, esta última ajustada 24 horas antes de la reunión.
Y es que durante la semana santa Nugil había nominado para integrar la junta como miembros patrimoniales, en su orden, a Ricardo Fandiño, Jaime Gilinski, Gabriel Gilinski y Ricardo Díaz; pero previo a la asamblea modificó el orden.
Así, para efectos de la elección la disposición de los postulados en la nominación de Nugil fue: Gabriel Gilinski, Ricardo Fandiño, Ricardo Díaz y Jaime Gilinski, lo que provocó que con el 33,17% de los votos el primer renglón, es decir Gabriel Gilinski, obtuviera el asiento de la junta directiva por cociente.
Este cambio en el orden de los nombres de la lista, hecho a última hora, está autorizado en la normativa. Cosa contraria habría sido si la intención de Nugil fuera la de proponer otro nombre entre sus nominados.
Con la movida, Ricardo Fandiño que era el miembro patrimonial de la junta directiva de Nutresa, en representación de la familia Gilinski, quedó por fuera de ese órgano de administración.
En marzo del año pasado en asamblea ordinaria de Nutresa, Gabriel también fue elegido como miembro patrimonial de la junta, pero renunció tres meses después para evitar un posible conflicto de interés, en las deliberaciones que para ese momento se suscitaron por Ofertas Públicas de Adquisición (OPA) lanzadas por acciones de Sura y Argos, compañías en las que Nutresa tiene participación.
Y, desde noviembre del año pasado, Gabriel Gilinski hace parte de la junta directiva del Grupo Sura como miembro patrimonial, donde lo acompañan Ángela Tafur y María Ximena Lombana, representando a JGDB Holdings.
También se fue y volvió
Otra jugada ejecutada por los Gilinski en el último mes tiene que ver con la salida y regreso a la junta de la holding de alimentos de Christian Murrle Rojas.
El pasado 21 de marzo en información relevante publicada por la Superfinanciera se indicó que el empresario caleño dejaba de ser miembro independiente de la junta de Nutresa, por no estar de acuerdo con la decisión adoptada por la asamblea de accionistas que ese día aprobó una reforma de estatutos.
Dicha modificación condujo a extender el periodo de designación de la junta directiva que había en ese momento, hasta marzo de 2024. Pero la renuncia de Murrle dejó incompleto el órgano directivo, cuyo ajuste se logró ayer con el regreso de él a ese cuadro administrativo.
“Hay cosas en las que arrepentirse tarde, no repara el daño”, comentaron asistentes a esta reunión, en referencia a la actuación de Murrle y los Gilinski que obligaron a la realización de una nueva asamblea extraordinaria, la segunda del año, para definir la conformación de la junta.
La elección de Murrle fue respaldada por el 33,17% de los votos, con lo que el Grupo Gilinski mantiene dos de los siete miembros de la junta directiva de Nutresa.
En su hoja de vida se lee que se ha desempeñado como director Ejecutivo Panamerican Capital Partners LLC, New York, sociedad que el periodista Daniel Coronell señaló en 2018 (en una columna de opinión de la revista Semana) como partícipe en el descalabro conocido como “los bonos del agua o Carrasquilla” (por el apellido del exministro de Hacienda Alberto Carrasquilla, una estrategia para que varios municipios consiguieran recursos para construir acueductos y alcantarillados, propósito que fracasó.
La sesión realizada en el Country Club de Medellín tuvo un quorum del 95,26%, y en ella también fueron elegidos como integrantes independientes de la junta de Nutresa Jaime Alberto Palacio y Andrés Arango por nominación de Sura; y Luis Felipe Hoyos, Jesús Vallejo y Juan Constantino Martínez como integrantes patrimoniales en representación de Sura y Micro Inversiones. El mandato de esta junta irá desde ayer, 11 de abril de 2023, hasta el 31 de marzo del año que viene, 2024.
En esta elección participaron los grupos Sura y Argos que la semana pasada, en asamblea extraordinaria de Nutresa, fueron autorizados para deliberar y decidir en los asuntos de la compañía de alimentos, por las participaciones accionarias significativas que poseen, cosa que pretendió impedir el Grupo Gilinski.
De hecho, en la noche del lunes se conoció un fallo de un tribunal de Medellín que negó por improcedente una acción de tutela instaurada por el Grupo Sura, en contra de la Superintendencia de Sociedades (Supersociedades), con la que se pretendía demostrar que esa entidad había vulnerado los derechos de la holding de inversiones, al pretender que no pudiera ejercer sus derechos como accionista, en particular el derecho al voto en las asambleas de Nutresa.
Según Sura esa determinación de la justicia no significa que sus representantes no puedan votar en las asambleas de los grupos Argos o Nutresa, lo que se evidenció ayer en la asamblea de la compañía de alimentos, donde los abogados que asistieron en representación de los Gilinski, de la firma DLA Piper Martínez Beltrán, no intentaron siquiera cuestionar u objetar.
Juntas completas
Con unos órganos directivos ajustados y debidamente estructurados, se esperan que los conglomerados empresariales Nutresa y Sura puedan seguir avanzando en el desarrollo de sus negocios.
En el caso del grupo de alimentos, que cerró el año 2022 con resultados récord, empieza a observar señales de desaceleración, lo que está en línea con el menor dinamismo que se evidencia en la economía.
En el caso de Sura, que se lleve a buen término la iniciativa aprobada por la asamblea ordinaria como la recompra de acciones, por un monto de $300.000 millones, tarea para la que la junta debe definir las condiciones.
Coincidiendo con la asamblea extraordinaria de Nutresa se conoció la reciente publicación hecha por The New Yorker, en la que se señala que el jeque Mohammed bin Zayed, gobernante de los Emiratos Árabes Unidos, pagó millones de dólares a una empresa de inteligencia privada suiza para contaminar a los supuestos enemigos en diversa partes del mundo. Se recordó que la familia real emiratí es socia y financiadora de las ofertas lanzadas por el Grupo Gilinski por acciones de Sura, Nutresa y Argos, e incluso una de sus sociedades (IHC) intentó hacerse con una porción relevante de la propiedad de Nutresa.
