Aún con un dólar caro, los hogares colombianos no dejaron de consumir alimentos importados.
Eso se puede concluir del último reporte del Dane, que mostró ayer que al país entraron 7 % más alimentos elaborados para el consumo de los hogares entre enero y octubre pasados frente a igual lapso de 2015. En el periodo se facturó por esta vía un monto de 1.719 millones de dólares.
En contraste, el efecto de una tasa de cambio alta jugó en contra de los aparatos tecnológicos, como televisores, smartphones, computadores, entre otros. La entrada de este tipo de productos se redujo en 30,1 % en lo corrido del año a octubre, hasta los 7.214 millones de dólares, mientras en los primeros diez meses de 2015 ingresaron 10.328 millones de dólares en estos bienes.
Estos datos aportaron a que el balance de importaciones para los primeros diez meses del año arrojara una reducción de 19,7 %, hasta los 36.683,5 millones de dólares. Solo para octubre, la caída fue de 20 %, para totalizar 3.612 millones.
Las caída principal en lo corrido del año se vio en la entrada de combustibles, que cayeron a una tasa del 25,8 %.
Sin embargo, el rubro de manufacturas, que participa con el 77 % del total de las importaciones, cayó 22 %, en comparación con enero-octubre de 2015.
En cambio, la importación de productos agropecuarios, alimentos y bebidas aumentó en 2,3 % frente al año pasado, hasta los 5.221 millones de dólares.