viernes
7 y 9
7 y 9
Toda una sorpresa dio la junta directiva del Banco de la República ayer, al informar que subió la tasa de interés de política monetaria de 2% a 2,50%. Esto, luego de un pulso de cinco votos contra dos, en el que el grueso de codirectores se inclinaron por elevar 50 puntos básicos el indicador, mientras que los restantes abogaron por hacerlo en 25 puntos básicos.
¿Por qué asombró la determinación? Si bien los especialistas esperaban una decisión alcista, creían que sería menor. Por ejemplo, la Encuesta Mensual de Expectativas del propio Banrepública reflejó que una media de 43 analistas esperaba un ajuste del 2% al 2,25%.
Lo mismo sucedió en la Encuesta de Opinión Financiera, de Fedesarrollo, en la cual el 65% de analistas proyectó un incremento hasta 2,25%, mientras que solo 25% esperaba un 2,50% y el restante 10% tenía en sus cálculos que la tasa se mantuviera inalterada.
En este sentido, el banco central explicó que su sorpresiva decisión tiene que ver con que la recuperación económica va más rápido de lo esperado, lo cual se ha visto en el fortalecimiento de la demanda interna, es decir, se están viendo importantes cifras en el gasto de los colombianos.
Leonardo Villar, gerente general del Banrepública, reseñó que esa situación provocó además que la entidad subiera sus proyecciones de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia para este año a 9,8%, y a 4,7% para 2022.
Villar agregó que “la inflación anual, a fin de septiembre, se ubicó en 4,51%, alcanzando un nivel por encima de lo esperado. El incremento se explica en gran parte por el comportamiento de los precios de los alimentos y de los regulados. El equipo técnico (del banco) revisó al alza el pronóstico de inflación a 4,9% y 3,6% para finales de 2021 y 2022, respectivamente”.
Daniel Velandia, director ejecutivo de Research y economista jefe de Credicorp Capital, explicó que es de esperar que el estímulo monetario vaya reduciéndose gradualmente e incluso es posible que nuevamente la una tasa de intervención incremente 50 puntos básicos en diciembre (hasta 3%), cuando los codirectores del banco volverán a discutir sobre ese indicador (ver Gráfico).
“Todo esto, para anclar expectativas y que el incremento reciente en precios no se indexe a la inflación del 2022. Si esta estrategia funciona, que esperaríamos que sí, es de prever que el banco continúe con incrementos más graduales el próximo año, de a 25 puntos básicos, hasta alcanzar niveles cercanos a 4,50%”, agregó Velandia.
Vale mencionar que la tasa de intervención de política monetaria es la tasa de interés mínima que el Emisor le cobra a las entidades financieras por los préstamos que les hace, y es un mecanismo que afecta la cantidad de dinero que circula en la economía