Avianca Holdings afrontó ayer una jornada clave en la que el juez de bancarrotas de Nueva York debía decidir si avalaba el plan de reorganización de la empresa, evento que finalmente no sucedió en tanto la audiencia finalmente fue aplazada.
“Como parte del proceso de salida de Capítulo 11, y en el marco de la audiencia de confirmación del Plan de Reorganización, el Tribunal de Bancarrotas del Distrito de Nueva York solicitó documentación adicional requerida para confirmar el plan. Fijó como límite el próximo jueves 28 a las 5:00 p.m. –hora Nueva York– para hacer dichas entregas. Avianca trabajará a buen ritmo para seguir adelante con el proceso”, explicó el holding en un breve comunicado.
Pero la noticia no fue solamente el aplazamiento. Durante la audiencia, que empezó en horas de la mañana, una revelación de la compañía sorprendió al juez de quiebras, Martin Glenn: si aprueban que Avianca salga del Capítulo 11, esta se convertiría en una firma constituida a Reino Unido.
Información difundida por Bloomberg describe que el juez dijo que a su parecer es “inapropiado” que la posible nueva sede no se comunicara con anterioridad al público.
Según él, la ventaja que tendría el holding en caso de quebrar bajo las leyes británicas es que los nuevos propietarios podrían mantener el capital incluso ante la objeción de los acreedores.