Adrián Hernández, expresidente de Comcel, cabeza de la segunda empresa más poderosa del país durante siete años (2001-2009) y quien reapareció en los medios hace unas semanas relatando el increíble giro de su vida, fue hallado muerto en una casa de San Nicolás, en el norte de Bogotá.
El general Humberto Guatibonza, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, confirmó que a las 10:20 de la noche del jueves fue encontrado el cadáver de Hernández, quien habría muerto por causas naturales, pues su salud se encontraba en condiciones precarias dada su enfermedad de Párkinson y su sobrepeso a causa de las medicinas que consumía para tratar su condición.
La Revista Semana reveló hace poco en un informe que tituló “El viaje al infierno de Adrián Hernández”, la historia del empresario mexicano que pasó de vivir entre lujos a habitar en una casa de paso y hasta pedir dinero para conseguir comida.
Hernández nació en Chihuahua, México, en el seno de una familia humilde, vendiendo paletas y realizando actividades de albañil. Sus primeros pasos en las telecomunicaciones los dio en Telcel, cuando Carlos Slim, el magnate mexicano también comenzaba en el negocio.
Su trayectoria en el conglomerado mexicano fue ascendente y tras su paso por Guatemala llegó a Colombia donde consolidó la presencia y fortaleza de Comcel. Luego fue despedido por un escándalo de negocios que afectó la compañía y optó por no entrar en conflicto con el magnate mexicano.
Al agotar sus recursos, los últimos días de Hernández pasaron entre la necesidad y la enfermedad en Bogotá y se espera que las autoridades precisen la causa de su deceso.