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A una anciana de San Cristóbal le subieron predial de un lote 2.700%

En la actualización catastral pasó de valer $3.147.000 a $85.670.000, lo cual elevó el valor predial trimestral de $25.964 a $702.817. El ajuste agravó la condición de salud de la dueña.

  • A una anciana de San Cristóbal le subieron predial de un lote 2.700%
  • Mostrando el recibo, dice que debe haber un error en la liquidación. Foto: Carlos Velásquez.
    Mostrando el recibo, dice que debe haber un error en la liquidación. Foto: Carlos Velásquez.
05 de marzo de 2023
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A sus 89 años y ya postrada en una cama tras sufrir una lesión de cadera, María Bernarda Muñoz recibió la peor noticia de su vida, por lo menos en los últimos 28 años: el lote de su propiedad que espera dejarles de herencia a sus siete hijos, un predio sencillo de escasos metros, de repente adquirió el valor de una finca de recreo, pues el impuesto predial le subió 2.700%, y esto en vez de alegrarle la vida la sumió en una depresión profunda.

Hasta el pasado diciembre, María Bernarda pagaba cada trimestre $25.964, pero la última cuenta, la correspondiente al primer trimestre de 2023, le llegó por $702.817. Los recibos los enseña su hija Vitalia, a quien le tocó asumir la vocería de la denuncia debido al mal estado de salud que presenta su madre, el cual, dice, se agravó desde que recibió la noticia del incremento.

“Mi mamá no ha asumido el problema, dice que solo llevemos los recibos y demostremos que es un error”, cuenta Vitalia.

El lote está ubicado en la vereda Palenque Chambacú, del corregimiento San Cristóbal, y fue lo que le quedó a María Bernarda de la repartición de la herencia de su padre. Ella cuidó el lote con tal esmero, que de los $80 mil pesos de subsidio que recibe cada mes como beneficiaria del programa Adulto Mayor, siempre saca los $25.964 del impuesto: “Es una obsesión de ella, que si toca tomar aguapanela lo hagamos, pero que con el impuesto no nos atrasemos”, dice Vitalia.

El predio, que antes tenía un avalúo catastral de $3.147.000, pasó a valer $85.167.000 con la actualización. Comercialmente, asegura Vitalia, el valor sería de más de $300 millones. Esto, en vez de favorecer a la familia, la perjudicó, pues es un predio que en la práctica es inservible y venderlo es prácticamente imposible. ¿Por qué razón?

Mostrando el recibo, dice que debe haber un error en la liquidación. Foto: Carlos Velásquez.
Mostrando el recibo, dice que debe haber un error en la liquidación. Foto: Carlos Velásquez.

No se puede construir

Según la versión de Vitalia, el gran problema del lote es que allí no se puede construir. Ya la familia ha solicitado permiso y una Curaduría se los negó con el argumento de que por allí va a pasar una carretera. De hecho, algunos inmuebles vecinos -no todos- han frenado ampliaciones por este mismo problema.

Adicional, en la parte inferior del mismo hay un talud de 2,5 metros y manifiesta riesgo. Además, en la zona no hay alcantarillado y el servicio de acueducto lo presta una empresa multiveredal llamada La Acuarela, que nació para surtir del líquido a 1.200 usuarios y en la actualidad abastece a 4.500, lo que hace que el agua escasee y solo se conecte por horas.

“Mi madre nunca lo puso en venta por esta situación, dice que no se puede engañar a la gente vendiéndole un lote en el que no podrán levantar una casa y que no tendrá conexión de agua”.

Ante todo esto, y aclarando que el predio figura como estrato cero, ella hizo el reclamo en la Secretaría de Hacienda de Medellín, pero la remitieron a Catastro. Esta dependencia les dijo, según su versión, que consigan un perito que avalúe el predio, “pero me dijeron que esto no garantiza nada”. Es decir, podrían perder el dinero invertido en este funcionario.

A Vitalia le explicaron que el incremento se debe al nuevo catastro multipropósito, que busca actualizar el valor de los lotes de engorde, pero advierte que el predio de su madre no tiene ese carácter. “Hay sembrados palos de naranja, mandarinas, mangos, limones y un guamo que lo amarra para que no caiga. Mi esposo lo cuida y no hay nada construido porque no nos dejan”.

Irónicamente, expresa, los funcionarios de Catastro le han dicho que si hubieran tenido algo construido no habría ocurrido la exorbitante alza del impuesto: “O sea, nos castigan por ser legales, por respetar la ley”, se lamenta con las cuentas del predial en sus manos .

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