El proyecto de nueva Constitución de Cuba, que sustituye a la vigente desde 1976, fue respaldado por el 86,8 % de los votantes en el referendo celebrado el domingo y cuyos resultados se conocieron en la tarde de ayer. En la jornada democrática la participación fue del 84,4 %.
De los 7.848.343 millones de votos depositados, el 86,8 % dio un “sí” al nuevo texto; el 9 % lo rechazó, y el 4,1 % restante correspondió a votos en blanco o nulos, informó en una rueda de prensa la presidenta de la Comisión Electoral Nacional (CEN), Alina Balseiro.
La nueva Constitución no modifica el sistema político de la isla, supeditado al Partido Comunista, ni renuncia al comunismo, pero sí plasma los cambios económicos y sociales producidos en el país en la última década tras las reformas introducidas durante los dos mandatos del hoy expresidente Raúl Castro (2008-2018).
La nueva Constitución
En Cuba no se celebraba un proceso de este tipo desde 1976, cuando se votó la actual Carta Magna, un texto a la medida del entonces mandatario Fidel Castro y de los tiempos de la Guerra Fría que fue refrendado por el 97 % de los votantes, con una abstención del 2 %.
El nuevo documento, cuya promulgación aún no tiene fijada fecha, contiene 229 artículos, 11 títulos, dos disposiciones especiales, 13 transitorias y dos finales.
La Constitución refrendada el domingo mantiene al Partido Comunista de Cuba como “fuerza dirigente superior de la sociedad” y ratifica el comunismo como aspiración, pese a que ese término se había eliminado en el primer borrador de la reforma constitucional.
Como novedades reconoce a la propiedad privada, considera la inversión extranjera como necesaria, instituye las figuras del presidente de la República y el primer ministro, y establece un límite de dos mandatos presidenciales consecutivos.
En el proceso de su consulta llamó la atención de la comunidad internacional la posibilidad de aceptar el matrimonio entre parejas del mismo sexo. No obstante, esta iniciativa no quedó en el texto final que los ciudadanos votaron.
Además, en el primer borrador –de agosto de 2018– no se declaraba al país como estado socialista y esta categoría sí quedó en el texto que se aprobó durante el fin de semana. De esta forma, el país aprobó una transformación constitucional que poco cambia el sistema de la isla y la selección de quienes la gobiernan.
25
mil colegios electorales hay en Cuba, informó la Comisión Electoral Nacional.